Los New York Knicks cerraron una semana perfecto (3-0) al imponerse en el Smoothie King Center de New Orleans por 123 a 117 con un imperial R.J. Barrett, que anotó 35 puntos, su nuevo tope anotador de carrera NBA.
Además, el canadiense fue clave en la recta final con sendos triples y una asistencia a su compañero Taj Gibson que ayudaron a cerrar el choque cuando los Pelicans recortaron distancias, gracias al novato Herb Jones, para colocarse 111-109 abajo a falta de 01:51 minutos.
«Ha sido muy divertido. Sobre todo por el partido que fue», admitió R.J. Barrett a ESPN. «Los Pelicans se esforzaron mucho llegando al final del partido. Así que definitivamente ha sido muy bueno obtener un máximo de carrera, pero ya sabes, estoy más contento por haber obtenido la victoria», explicó.
Los Knicks gracias a sus tres triunfos consecutivos ante Philadelphia, Chicago y New Orleans se colocan líderes provisionales de la Conferencia Este con un récord de 5-1, y mañana lunes reciben a los Toronto Raptors en el Madison Square Garden.
Por su parte, todo lo contrario sucede con los Pelicans, que no terminan de dar con la tecla en estos primeros compases. A la importante baja de Zion Williamson, a última hora se unió la de otro de sus principales anotadores: Brandon Ingram, debido a una contusión en su cadera derecha. No obstante, los de Willie Green presentaron batalla hasta el pitido final pese a ir por detrás en el marcador desde los 16 segundos iniciales.
En este inicio de temporada registran un 0-4 en su pabellón, y un 1-6 en el global, siendo el farolillo rojo de la Conferencia Oeste.
«Estamos aprendiendo en cada partido. Todavía siento en mi corazón que estamos mejorando y que las cosas van a cambiar. Estamos ahí. Estamos luchando, llamando a las puertas», destacó Willie Green.
El pívot lituano Jonas Valanciunas fue el más destacado de los locales con 27 puntos y 14 rebotes, 18 de ellos en la primera mitad; seguido por Devonte Graham con 17 tantos y 8 asistencias.
En los Knicks, además del espléndido partido protagonizado por Barrett, la anotación estuvo bastante repartida y hasta cinco compañeros aportaron dobles dígitos anotadores: Evan Fournier y Kemba Walker, ambos con 19 puntos; Taj Gibson con 13 tantos y 7 rebotes; y Julius Randle y Alec Burks cerraron con 10.
«Solo estamos jugando con fluidez y yendo con lo que tenemos delante. Esta noche fue R.J. quien hizo los tiros y seguimos yendo con él», señaló Evan Fournier.
Por segunda noche consecutiva Barrett ha comandado la ofensiva de los Knicks, además de su notable labor en defensa. El escolta está dando otro paso hacia delante en su tercera campaña NBA. En Chicago metió 20 puntos con un 8 de 15 en tiros de campo; y en NOLA obtuvo su récord personal con 35 puntos junto a 8 rebotes, 6 asistencias y un 6 de 8 en triples.
«Solo leía las defensas. Sé que puedo ser el tipo de jugador que tenga noches así y estoy contento de haber podido demostrarlo esta noche», concluyó Barrett.
(Fotografía de portada: Sean Gardner/Getty Images)