Sin duda se esperaba que la serie entre New York Knicks e Indiana Pacers fuese competida, pero para nada que tras dos partidos en el Madison Square Garden el balance fuese de 2-0 a favor de los de Indianapolis, y menos con un Jalen Brunson que promedia 39 puntos.
Los neoyorquinos están jugando bien; tanto es así que han estado por delante en el marcador más tiempo que su rival, pero a la hora de la verdad son los chicos de Rick Carlisle los que están marcando el desenlace de los partidos. ¿Sorprende? Quizás, pero al menos Brunson tiene claro dónde está el problema.
«Las rotaciones defensivas no funcionaron bien. Necesitamos hacer más para ayudarnos mutuamente», comenta el base señalando a la concentración durante 48 minutos como algo esencial para frenar a los de Indianapolis, quienes hicieron 38 puntos en el último cuarto del Game 1 y 33 en el Game 2. Son demasiados despistes, según Brunson, como para imponerse a un contrincante de tal nivel.
«Estamos en la final de conferencia y ahora mismo no importa nada más. Tenemos un partido cada dos días. Estamos jugando un momento crucial. La concentración mental, todo, tiene que estar ahí. No hay dudas al respecto en este momento», expresa sobre la determinación a cambiar la actual dinámica.
¿Puede hacer más Thibodeau?
Protagonista en los halagos, tampoco se libra de las críticas el entrenador de los Knicks. Tras el primer partido abrió la puerta a cambiar el quinteto inicial, pero no lo hizo. Ahora se abre ese debate y también el de hasta qué punto Karl-Anthony Towns les está penalizando, y es que con el pívot en pista tuvieron un -20, balance que llevó al técnico a sentarle en la mayoría del último cuarto.
(Fotografía de Brad Penner-Imagn Images)