Los Rockets están aprovechando la reconversión de James Harden a distribuidor sin que pierda una pizca de su peligro encarando la canasta. Al contrario, el antaño escolta sigue siendo uno de los mejores finalizadores de la NBA. San Antonio, lejos todavía de la fiabilidad de la pasada campaña, cayó en casa sufriendo en defensa el brillante juego ofensivo de su rival. El triple-doble de James Harden, su primero de temporada, fue lo mejor de los Rockets para su triunfo por 99-101.
Cargado triple-doble
24 puntos, 15 asistencias y 12 rebotes fue el balance positivo de James Harden, que eso sí también añadió 8 pérdidas a su línea estadística. Pese a ello, los números en el pase de la estrella de los Rockets empiezan a ser de escándalo. El de San Antonio fue su quinto partido esta temporada con al menos 15 asistencias de sus 8 disputados. En los últimos 30 años, solo John Stockton y Rajon Rondo habían arrancado una campaña así y, por supuesto, sin superar los 30 puntos de promedio.
Parar esta máquina ofensiva fue el gran reto de San Antonio, que recuperó a un buen defensor exterior como Danny Green tras superar su lesión múscular sufrida en pretemporada. No sirvió de mucho. Los Rockets abrieron pronto hueco ante la nada habitual fragilidad defensiva de los Spurs. La principal víctima en la búsqueda de soluciones de Gregg Popovich acabó siendo Pau Gasol, quien solo jugó 13 minutos. Para compensar, Kawhi Leonard jugó un partido agresivo en ataque, terminando con 34 puntos. Su esfuerzo permitió al menos a San Antonio llegar a un desenlace igualado.
Final de errores
LaMarcus HOW DO YOU MISS THIS 😐https://t.co/iyPnr8ATwx
— Rob Perez (@WorldWideWob) November 10, 2016
Houston ganó pero, eso sí, el final no fue el ideal para James Harden, quien desaprovechó las últimas posesiones para sentenciar por culpa de malos tiros o pérdidas de balón. San Antonio tuvo al final la última oportunidad de empatar, pero ni Kawhi Leonard ni LaMarcus Aldridge consiguieron su objetivo.
San Antonio ve a su equipo perder su tercer partido consecutivo (segunda peor racha desde la primera temporada completa de Gregg Popovich en 1997-98) y Houston disfruta la explosión de James Harden, uno de los bases más improbablemente eficaces de los últimos tiempos. James Harden prolongó su cómodo líderazgo en asistencias de la liga con un triunfo en una fortaleza hoy vulnerable.