Marzo es el mes que los Golden State Warriors han señalado para la vuelta de James Wiseman a las canchas NBA. El número dos del draft de 2020 se lesionó del menisco de su rodilla hace ya casi un año. Desde entonces su regreso se ha ido prolongando hasta el día de hoy, cuando la franquicia ha anunciado que el joven pívot ya está totalmente preparado para volver a jugar. Al menos en lo que se refiere a su estado físico. Sin embargo, su primera toma de contacto con el baloncesto de competición real no será con Golden State, sino con su filial de la G League los Santa Cruz Warriors con los que debutará este jueves.
Wiseman ya ha estado integrado con la dinámica del equipo durante buena parte de la temporada. Con ellos disputó sus primeros entrenamientos de alta intensidad y cinco contra cinco allá por noviembre. Después de aquella toma de contacto, el jugador volvió a recaer de su lesión y tuvo que someterse a una nueva operación de rodilla. Aunque la cirugía fuese menor, amplió su tiempo en el dique seco a un plazo indefinido.
El debut en la G League debería implicar verle muy pronto vestido con el uniforme de los Warriors en la NBA. En la franquicia creen que su regreso es una gran noticia de cara a las aspiraciones del equipo. Que no son otras que pelear por el anillo. Incluso Steve Kerr y Stephen Curry se muestran entusiasmados con el impacto que Wiseman puede significar una vez lleguen las eliminatorias. Sin embargo, aún hay que ver en acción a un jugador que lleva desde abril de 2021 sin jugar y que en su corta experiencia como jugador profesional dejó tantas dudas como muestras de potencial futuro.
(Fotografía de portada de Ezra Shaw/Getty Images)