Siete partidos de G League que se traducen a once encuentros NBA y 23 días. Ese es el tiempo que James Wiseman ha estado viendo a sus compañeros de Golden State desde la distancia de los Santa Cruz Warriors. El lapso que ha pasado desde que Kerr anunció que el joven pívot quedaba apartado del día a día del primer equipo hasta que le han vuelto a llamar a filas hoy mismo. Wiseman se reincorpora hoy a la rutina de los Warriors tras haber pasado por la hermana pequeña de la NBA para corregir ciertos problemas que afectaron a su juego en el inicio de campaña. De hecho, hoy será parte de los jugadores a disposición de Steve Kerr para el enfrentamiento ante Utah en Salt Lake City.
El interior fue uno de los protagonistas del mal comienzo de los de San Francisco, cargando buena culpa de la floja defensa y el nefasto rendimiento de la segunda unidad. Su ‘descenso’ a la G League pudo ser un tirón de orejas, pero el chico se centró en tomárselo como una oportunidad para seguir creciendo y coger rodaje. La carrera de James, incluso antes de ser profesional, ha pasado por baches severos en los últimos años, disputando poco más de 50 partidos desde la 2020-21. En su periplo por la liga de desarrollo Wiseman ha promediado 15,6 puntos, 10,1 rebotes y 1,1 tapón en casi 27 minutos por noche.
Wiseman y su lugar en los planes del equipo
Será interesante tomar nota del rol que recibe una vez de vuelta. Hace poco Kerr aseguraba que no siente la necesidad de hacer cambios innecesarios en este momento. Los Warriors parecen haber encontrado cierta estabilidad situando a Draymond Green muchos minutos con los jugadores que parten desde el banquillo. Sin embargo, es raro que el técnico y la organización decidan recuperarle si no es para aportar algunos minutos e intentar acoplarle en el plan actual. Más sabiendo lo propenso que es Kerr a estirar su plantilla más allá del décimo jugador de la rotación.
(Fotografía de portada de Ethan Miller/Getty Images)