El alero de 28 años será agente libre sin restricciones al final de la presente temporada (actualmente suspendida)
Joe Harris quiere seguir jugando en Brooklyn Nets, y no solo el próximo año, sino toda su carrera. En una entrevista con el locutor de los Nets, Ian Eagle, el alero ha dejado claro que su preferencia de cara a la próxima agencia libre es seguir vinculado al equipo en el que está desde 2016, donde se ha asentado como uno de los mejores tiradores de la NBA.
«En un mundo ideal jugaría toda mi carrera en Brooklyn. Entré con Sean Marks (general manager), así como con los propietarios. Es una de esas situaciones en las que tienes una conexión cercana con muchas personas dentro de la organización, ya que todos entramos juntos. Ahora llevo aquí cuatro años y he establecido relaciones increíbles con todo el mundo. Es sorprendente ver a dónde hemos llegado desde el primer año. Obviamente quiero ser parte de esto durante mucho tiempo», concluye.
El rendimiento de Harris en Brooklyn no debe generar duda alguna en la organización sobre el acierto que sería seguir contando con él. En 2016, cuando estaba sin equipo tras ser cortado por Orlando, donde llegó traspasado desde Cleveland, los Nets le firmaron dos años por el mínimo. El movimiento fue más que acertado. Desde entonces, y habiendo renovado en 2018 por dos cursos y 16 millones de dólares, ha sido titular en 164 de 269 partidos para promediar 11,9 puntos con un excelente 42,3% en triples. En la anterior temporada, la 2018-19, lideró la NBA en triples con un 47,4%.
Las estadísticas hablan claro, pero el hecho de que sea agente libre sin restricciones al terminar la actual campaña (por ahora suspendida) hace que no vaya a ser nada sencillo que se mantenga en Brooklyn. Aunque los Nets deseen que continúe, es muy probable que no le falten pretendientes y que alguno de estos le ponga sobre la mesa más millones que los neoyorquinos. En ese caso, está por ver hasta dónde estarían dispuestos a llegar los Nets, así como a cuánto renunciaría Harris. Puede que las pérdidas por la suspensión de la competición y las consecuentes restricciones salariales jueguen a favor de Brooklyn al haber menos dinero para repartir en la agencia libre.
(Fotografía de Emilee Chinn/Getty Images)