Pese al espléndido momento de forma que atraviesa Philadelphia 76ers, bajan las aguas un poco revueltas tras las últimas declaraciones de Joel Embiid. El pívot, que se perdió su primer partido del curso por descanso, ha reconocido que se siente un poco frustrado desde el traspaso de Jimmy Butler.
¿Frustrado por qué? Se preguntarán algunos… En su papel de líder, su aportación ofensiva ha bajado desde el fichaje del escolta. Asimismo, su rol está siendo algo diferente y juega más alejado del aro, lo que provoca que sus números empeoren.
«Últimamente no he sido yo mismo», dijo Embiid a ESPN. «Creo que principalmente se debe a la forma en la que me han utilizado en la pista. Ahora mismo estoy abriendo más la pista y lanzando con un 29% desde el triple», explicó.
«Pero parece que en los últimos partidos, por la forma en la que juego, el entrenador siempre me hace empezar desde el perímetro, y eso realmente me frustra», reconoció
Embiid, de 24 años, está promediando 26,3 puntos, 13,3 rebotes, 2 tapones y 3,6 asistencias en 34,3 minutos.
Sin embargo, sus números están siendo especialmente llamativos desde el aterrizaje de Butler: ha pasado de 28,2 a 23,8 puntos; de un 48,4% en tiros de campo a un 43,1%; y del 30,2% en triples a un gris 27,3%.
Asimismo, en los últimos tres partidos ha completado un 14/42 en el lanzamiento y un 1/9 desde más allá de la línea de 6,75 metros.
«A veces tenemos que abrir el campo. Y bastante tiempo porque en realidad muchas de nuestras jugadas están configuradas así, por lo que tiendo a pasar mucho tiempo en el perímetro. Así que solo se trata de un ajuste», explicó.
Pese a las palabras del pívot, los Sixers se encuentran en un estado de forma fantástico y ha ganado en cinco de las últimas seis jornadas, y desde que llegara Butler atesoran un llamativo récord de 10-3, siendo segundos del Este con un global de 18-9.
(Fotografía de portada: Mitchell Leff/Getty Images)