El día de los 60 puntos con los que Kobe Bryant se despidió de la NBA, el nombre de Jordan Crawford apareció de forma inesperada. Hasta la proeza de la «Mamba Negra», Crawford tenía el peculiar honor de ser el jugador que más puntos había anotado en el que era su último partido de temporada regular. Entonces con Golden State, Crawford explotó con 41 puntos ante Denver en el cierre de la Regular Season 2013-14.
Jordan Crawford, pero, pasó casi tres años sin volver a la liga, manteniendo un récord provisional destrozado en el canto de cisne de Kobe Bryant. Su reputación de gran anotador no le había servido para asegurarse un puesto de vuelta en la NBA, y menos en unos Warriors a punto de iniciar sus años dorados. Como plan B, Crawford llevaría su torrente ofensivo en etapas en China y a la D-League hasta esta misma temporada.
Un jugador renovado
Another strong start for @jcraw55 (7 points) as the #Pelicans lead 39-28 with 4:35 left in the 2nd on @FOXSportsNOLA! pic.twitter.com/eAskwjC2ih
— New Orleans Pelicans (@PelicansNBA) March 15, 2017
Y ha sido en la liga de desarrollo donde Crawford ha encontrado la madurez. A sus 28 años, el escolta ha mejorado en su toma de decisiones y su visión de juego, y puede haber encontrado un hogar permanente en New Orleans. Los Pelicans anunciaron este jueves la renovación de Jordan Crawford con contrato garantizado para lo que queda de temporada, además de la opción de jugarse el puesto en el equipo en la próxima campaña.
Para quien haya visto a Crawford en NOLA, la decisión no es sorprendente. En un equipo cargado de talento en el juego interior gracias a Anthony Davis y el recién llegado DeMarcus Cousins, el escolta ha tenido un impacto inmediato en el corto banquillo del equipo. Cubriendo la baja de jugadores como Tyreke Evans, Buddy Hield y Langston Galloway, traspasados a los Kings, Crawford promedia 14,2 puntos (con un espléndido 51,9% en triples) en sus cinco partidos jugados.
El punto de madurez
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Oculto en ese acierto mirando a canasta, lo que siempre ha sido la principal virtud del que fuera primera ronda en 2010, Jordan Crawford se está convirtiendo también en un seguro con el balón. Crawford promedia 3,2 asistencias en New Orleans por solo 0,6 pérdidas. Muestra pequeña, pero el escolta ha dado motivos de sobra para ganarse la confianza en los Pelicans más allá de su contrato de 10 días. Quizás por primera vez en su carrera, Jordan Crawford está en el lugar perfecto en el momento perfecto.