Josh Hart ha pasado por quirófano para prepararse para la temporada 25-26. Los New York Knicks han informado de que el alero se ha sometido a una operación en el dedo anular de su mano derecha, en el que sufrió una lesión durante los playoffs, para poder encontrarse en perfectas condiciones de cara al próximo curso.
Al tratarse de una operación menor, esta no parece destinada a afectar demasiado a Hart, que podrá volver a jugar a baloncesto a finales de verano. Así, debería poder estar disponible desde el arranque del training camp, realizando la pretemporada al completo con los de Mike Brown con total normalidad.
La lesión tuvo lugar en el Game 6 de la serie ante los Pacers, en el que se dislocó el dedo pero pudo seguir jugando. No obstante, no pudo impedir que este fuera el último encuentro de los neoyorquinos en la postemporada, pues cayeron por 125-108 y fueron eliminado en las Finales de Conferencia.
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Llegar hasta ellas consolidó a los Knicks como uno de los equipos con más potencial del Este, que ha quedado enormemente abierto tras las lesiones de hombres como Tatum, Haliburton o Lillard y permite a los neoyorquinos soñar con llegar incluso más lejos. Y para ello necesitarán un Josh Hart en perfectas condiciones, pues su energía y trabajo en labores como la defensa y el rebote son fundamentales en la identidad del equipo.
El alero viene de promediar 13,6 puntos, 9,5 rebotes y 5,9 asistencias durante el curso 24-25, consolidándose como una de las piezas de más valor para Tom Thibodeau. Ahora tendrá que seguir trabajando para mantener su peso tras el cambio de entrenador.
(Fotografía de portada: Trevor Ruszkowski-Imagn Images)
