Buenas noticias para los Clippers. Tras iniciar hace unas semanas los entrenamientos en cinco contra cinco, Kawhi Leonard parece haber respondido bien al regreso a la normalidad, hasta el punto de que, según el periodista de ESPN Shams Charania, se encuentra ya listo para volver a la acción. En concreto, la intención del alero es reaparecer esta misma noche en la visita a los Atlanta Hawks al Inuit Dome, en el que si nada se tuerce jugará su primer partido desde su inauguración.
Leonard lleva sin disputar un encuentro oficial desde el pasado 26 de abril, fecha desde la cual su situación se fue complicado de forma progresiva. El jugador fue sustituido por Derrick White en la convocatoria para los Juegos Olímpicos pese a que los Clippers afirmaban que se encontraba en buenas condiciones, posteriormente no hizo la pretemporada con los angelinos, y finalmente se anunció su baja poco antes de iniciar el curso. Una baja que, comunicada como «indefinida», hacía temer lo peor.
La vida sin Kawhi
No obstante, los de Tyronn Lue han resultado ser un equipo mucho más solvente de lo que muchos esperaban. Pese a la baja de su estrella y las salidas en el mercado de Paul George y Russell Westbrook, los angelinos han logrado mantenerse en la pelea por los puestos de acceso directo a playoffs con su balance actual de 19-15, superando holgadamente las expectativas de quienes esperaban una debacle. Con James Harden y Norman Powell a la cabeza, han capeado el temporal de forma ejemplar, y puede que ahora les toque volver a mirar para arriba.
Pese a todo, Leonard es un jugador del que cabe esperar prudencia. Se antoja más que probable que sus primeras tomas de contacto no sean muy intensas ni a nivel de agresividad ni de duración, permitiéndole simplemente coger ritmo de competición y volver a habituarse a ella. La duda es, tras dicho inicio lento, hasta dónde podrá llegar.
Durante el curso 23-24, Kawhi promedió 23,7 puntos, 6,1 rebotes y 3,6 asistencias, números con los que lideró a unos Clippers que ganaron 51 partidos y con los que fue All-NBA. Sin embargo, como es prácticamente costumbre a estas alturas, llegó tocado a la postemporada y apenas pudo ser de ayuda, lo que nos obliga a hacernos la pregunta de todos los años: ¿cambiará la cosa esta vez?
(Fotografía de portada: Jayne Kamin-Oncea-Imagn Images)