Draymond Green debe ser sin duda un jugador difícil de entrenar. Con su habitual tendencia a la polémica e incluso a la confrontación, Steve Kerr no ha escondido que sus charlas con él no son necesariamente las que tienen un tono más amistoso, algo que ha reconocido en su aparición en Le Batard Show. En él, se le preguntó cuál ha sido su momento de mayor enfado con el ala-pívot, a lo que el técnico respondió sin tener que pensarlo demasiado.
«Sin duda, el incidente con Jordan Poole» confesó. «Draymond y yo nos parecemos en muchos sentidos, aunque seguramente la gente no lo perciba así desde fuera. Los dos somos competidores obsesivos y somos muy agresivos el uno con el otro durante los partidos discutiendo sobre la estrategia, pero ese día cruzó una raya. Él lo sabe, lo supo inmediatamente, e hizo que la temporada fuera enormemente difícil para todo el mundo».
El incidente tuvo lugar en la pretemporada de 2022, en la que los Warriors venían de ser campeones de la NBA pero se encontraron con este cataclismo antes de arrancar su defensa del título. Green propinó un puñetazo a Poole durante una sesión de entrenamiento y desde entonces todo se desestabilizó, haciendo a Golden State arrancar el año a trompicones y prácticamente no recuperarse nunca.
La franquicia puso una multa a Draymond y le hizo apartarse durante un tiempo, aunque esto no implicó que se perdiera el arranque de la liga regular. Las sensaciones en el equipo, no obstante, fueron raras durante todo el año, y tras acabar con un balance de 44-38 los de Kerr acabaron siendo eliminados por los Lakers en la semifinales de conferencia.
(Fotografía de portada: Lachlan Cunningham/Getty Images)
