A estas alturas sobra decir que estos Phoenix Suns –sí, los del Big Three– dependen enormemente de que Kevin Durant se eche el equipo a sus espaldas. Ya hablemos de lograr la clasificación directa a playoffs o de tener una larga carrera hacia el anillo, será el nivel de uno de los mejores anotadores de la historia el que defina si están en la pelea o se quedan por el camino. Pues bien, la de esta pasada madrugada ha sido una de esas noches en las que KD brilla por encima de todos los demás.
Visitando a los campeones Nuggets, equipo que les eliminó en la postemporada de 2023 por 4-2 en las semifinales de la Conferencia Oeste, Durant firmó un partido de 35 puntos, 8 rebotes, 5 asistencias y 2 tapones, incluyendo además canastas decisivas como la que forzó la prórroga. Ya en el tiempo extra, aportó ocho puntos que sirvieron para certificar el triunfo por 107-117. El que fuese MVP de la NBA en 2014 quedó satisfecho.
«Si miras la temporada en su conjunto, obviamente el resultado final siempre es lo más importante en cuanto a jugar los playoffs y tratar de ganar un campeonato. Sin embargo, también celebras los pequeños momentos», comenta antes de hablar del triple que empató el partido.
«Al cruzar la cancha sabía que se trataba de vida o muerte, que tenía que convertir ese tiro o el partido podía irse. Lo sentí realmente bien al dejar mis manos. Me encanta sentir a la multitud quedándose en silencio. Siempre es una buena sensación en la carretera».
Si KD estuvo bien, qué decir de Grayson Allen. En ausencia de Devin Booker partió como titular para aportar hasta 28 puntos con ocho triples. Siempre se ha hablado de lo importante que es tener buenos tiradores para abrir la cancha y que las estrellas tengan espacio, pues Allen simplemente estuvo por encima de tal apreciación.
Una remontada sin premio
El partido entre Nuggets y Suns fue extraño. Los visitantes lograron una renta de hasta 22 puntos al principio del tercer cuarto y parecían tenerlo todo controlado, pero los de Colorado reaccionaron de manera espectacular para firmar un parcial de 12-0 que les dejó tres puntos arriba hasta que Durant llevó el choque a la prórroga. Jamal Murray, máximo anotador de los suyos con 28 puntos, admite que fue un final muy duro. «Es un partido que se pudo ganar. Esta puede ser una de las peores derrotas que hemos sufrido. Es duro, es realmente duro», comenta.
En lo que concierne al resto de actuaciones individuales, Nikola Jokic firmó un doble-doble de 25 puntos y 16 rebotes, mientras que Michael Porter Jr. se fue hasta los 20 tantos.
(Fotografía de Jamie Schwaberow/Getty Images)