El momento de juego de Kevin Durant es una auténtica locura. Pese a ser el quinto jugador de la NBA con mayor carga de minutos, contar con 35 años y haber tenido que supera una rotura en el tendón de Aquiles, KD no ha dicho ni mucho menos su última palabra en la NBA, algo que está demostrando últimamente a base de actuaciones sublimes.
Anoche, en cancha de los Cavaliers, dejó claro que está en su mejor momento desde la gravísima lesión de 2019 al marcharse hasta los 37 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias. Fue un despliegue repleto de talento y fuerza, uno que permitió a los Suns vencer 111-117 para agarrarse a la sexta plaza de la Conferencia Oeste con un balance de 38-27 y apretar a los Pelicans, quintos con 39-25.
Como decíamos, ver a Durant a este nivel está lejos de ser una excepción. Hace menos de una semana firmó 35 puntos para ganar en Denver y a los Celtics les metió hasta 45, si bien no pudo ganar. En cualquier caso, y ciñéndonos al mes de marzo, promedia 33 puntos con un 54 por ciento en tiros de campo y 42,9 por ciento en triples. Además, logra 6,8 rebotes y reparte 3,2 asistencias.
Más allá de lo bien que jugó KD, Phoenix contó con el regreso de Devin Booker tras su esguince de tobillo para lograr hasta 27 puntos, mientras que Bradley Beal aportó otros 24 a la causa. Cerrado el encuentro, Frank Vogel admitió que es consciente de que tiene entre manos un Big Three que le obliga a competir por todo.
«Tenemos la oportunidad de ser élite con Durant, Booker y Beal, así que estamos agradecidos de tenerlos a todos de regreso. Un partido como este se puede convertir en un retorno duro, pero justo por eso se podía ver el trabajo que hizo Devin mientras estuvo fuera. Tuvo una gran actuación», sentencia el head coach de la organización de Arizona.
30 para Garland
Cleveland perdió, pero no por bajar los brazos. Los de Ohio empezaron realmente bien y mediado el segundo cuarto vencían por hasta 19 puntos, pero no pudieron mantener tal dinámica pese a que Darius Garland terminó con 30 puntos y Caris LeVert aportó otros 17. El escolta señala que las ausencias de Max Strus, Evan Mobley y Donovan Mitchell están lejos de ser una excusa.
«Sabemos que somos capaces de ganar ese tipo de partidos, independientemente de quién tengamos fuera. Después de que ellos lanzaran un golpe, creo que nosotros siempre fuimos capaces de devolverlo, pero entraron en ritmo y ya fue difícil detenerlos», comenta LeVert.
(Fotografía de Nick Cammett/Getty Images)