Están siendo días raros en Oakland. Los Warriors están pasando por uno de sus peores momentos desde que forman parte de la flor y nata de la NBA y las derrotas llegan con mucha más frecuencia de lo acostumbrado. La última, este martes en casa ante Indiana por 81 a 92. Seis tropiezos en los nueve últimos compromisos.
Nuevamente Steve Kerr no pudo contar con ninguno de sus cuatro All-Stars para enfrentarse a los Pacers, pero los refuerzos ya están en camino. El técnico dijo que Kevin Durant probablemente estaría disponible el partido del jueves contra Milwaukee Bucks, pero el propio jugador fue más allá comentando a ESPN “podéis asegurarles que jugaré el jueves”.
Durant se ha perdido los seis últimos problemas a causa de un problema en una de sus costillas tras un choque recibido en un partido ante Minnesota Timberwolves, pero ya parece totalmente recuperado. De hecho Kerr dijo que Durant ya se encontraba mejor y quiso jugar contra Indiana, “pero no le hemos dejado”.
“Estamos tratando de ser inteligentes”, expuso Kerr. “Si KD se siente bien para jugar le vamos a dar dos días más hasta el siguiente partido para estar realmente seguros. Lo último que queremos para cualquiera de ellos es que se vuelvan a lesionar o quede algo renqueante, así que vamos a ser muy cautelosos con todos”.
Thompson y Green, los siguientes
Si todo va bien es posible que los Warriors terminen la semana con otros dos jugadores clave de vuelta. Draymond Green se perdió su segundo encuentro consecutivo por síntomas similares a la gripe, pero se da casi por seguro que será de la partida el jueves. “Ha estado en la sesión de tiro esta mañana y ha sudado, pero aún no está bien y no retiene los alimentos”, explicó Kerr.
Con Klay Thompson el pronóstico no es tan claro, pero es cuestión de días que vuelva a la alineación. ESPN apunta a que podría volver en una semana, pero Thompson dijo a Associated Press que será antes. “Estaré de vuelta pronto. Uno o dos partidos más”, comentó el escolta. Thompson se fracturó un dedo durante este mes en el mismo partido contra Minnesota en el que se lesionó Durant.
Visualizando la posición final
Los Warriors presentan un balance de 54 victorias y 20 derrotas. Con ocho partidos por jugarse, su posición como segundos de la Conferencia Oeste está prácticamente definida. Los Rockets (61-14) son ya inalcanzables salvo hecatombe de Houston y por detrás solo Portland (46-28) podría darles caza. Los de Oregon poseen el desempate contra Golden State, pero para intercambiar sus posiciones tendrían que ganar sus ocho partidos restantes y los Warriors perder los ocho suyos. Una victoria más de Golden State les garantizaría la segunda posición del Oeste como mal menor.
Mirando más allá por si los Warriors alcanzasen las Finales de la NBA por cuarto año consecutivo, en el Este hay dos equipos con balances similares que podrían ser el representante de esa conferencia en las Finales. Toronto (55-20) y Boston (51-23) aún aspiran a quedar con mejor balance que los Warriors y poder tener ventaja de campo en un hipotético enfrentamiento contra los californianos en el momento cumbre de la temporada.