Verano de 2014. Los Golden State Warriors querían sacar tajada del buen cartel que Klay Thompson se estaba granjeado en la liga. El traspaso con los Timberwolves, a pelo por Kevin Love, estaba YERSedianamente pactado. Pero con las plumas chorreando, alguien que pensó diferente cambió la historia ganadora del equipo que ahora mismo defiende título.
El movimiento resultaba hasta extrañamente codicioso para los Warriors. Una estrella consagrada de la NBA, 26 puntos, 12 rebotes y 4,5 asistencias ese año, por un jugador que estaba próximo a firmar un gran contrato y que en Oakland no estaban del todo convencidos de proporcionarle.
En un principio, los Warriors no querían incluir a Klay Thompson en ningún acuerdo, pero fueron comprendiendo que los Wolves no soltarían al hijo pródigo de la camada por cualquier retribución. Terminaron cediendo, decididos a romper con su actual escolta, que en la temporada 2013-14 había empezado a despegar con 18,4 puntos por actuación.
Las bases del traspaso estaban sentadas, Steve Kerr, recién llegado, sin demasiado mando para imponer su voluntad… pero alguien negó la mayor en las visiones de Bob Myers, general manager de los Warriors, y su corte, tal como recuerda Fox Sports.
Jerry West, importante consejero de la entidad y leyenda NBA como jugador hace décadas, no iba a dejar que el movimiento tuviera lugar.
Klay-Kevin ahora
Ahora, mirando con injustos ojos de presente, resultaría algo torpe dar a Thompson en lugar de Love, no obstante hay que entender que los Warriors querían engrandecer su proyecto (tras caer en primera ronda de Playoffs ante los Clippers) y para ello se creían huérfanos de una segunda estrella tras los primeros abusos de Stephen Curry.
Así, West se cerró en banda y alegó que si accedían al traspaso, él dejaría su puesto. Semanas después, Love fichó por los Cleveland Cavaliers, que actualmente se miden a los Warriors en la final.
Pequeños pedazos de la historia reciente que ayudan a explicar el territorio recorrido hasta las actuales Finales. West vio fragmentos de estrella donde otros un activo sobresaliente.
Uno y otro
Desde aquello, Thompson extendió su (deserved) gran contrato con los Warriors y ha llegado a su cénit anotador con 21,7 y 22,1 tantos por temporada respectivamente. Además, sus argumentos han crecido hasta convertirle en uno de los escoltas más completos de la liga, así como una estrella consagrada de la NBA.
Para Kevin Love, la persecución del anillo no rueda a marcha de Ferrari como esperaba. Tras una primera campaña de dudas y ausencia en las Finales, en su segundo año sigue sin encontrar los transbordos al campeonato que busca. Hoy, se perderá el Game 3 de las Finales debido a no haber recibido el O.K. por parte de la NBA.