Los Sacramento Kings han dado comienzo a la temporada 21-22 venciendo por 121-124 a los Blazers. El cuadro californiano se impuso en su visita al Moda Center comandado por un sensacional Harrison Barnes, que jugó el que posiblemente fue el mejor partido de su carrera y llevó en volandas a los de Walton durante muchos minutos.
El alero, con 36 puntos, firmó la anotación más alta de su trayectoria, superando los 34 que logró en 2016 como jugador de los Mavericks. La mayor parte de dichos puntos llegaron desde el triple, faceta en la que, con 8 aciertos en 11 intentos, Barnes batió otro récord personal y presumió de una increíble efectividad. Además, con 9 rebotes y 2 robos, logró aportar en otras áreas del juego, firmando una actuación magnífica que, si bien parece obvio que no va a ser la norma, sí hizo ver que arranca el curso con ganas de romper la mala racha de la franquicia.
Su entrenador, por contra, sí parece confiar en ver esta versión suya más a menudo: «Así es como quiero verle jugar todos los partidos. Le he desafiado a meter ocho triples cada noche. Es un gran tirador y no hay ninguna razón por la que no pueda meter esos tiros. Hoy necesitábamos cada uno de los puntos que ha sumado».
El alero estuvo secundado por De’Aaron Fox y Richaun Holmes, que con 27 y 21 tantos respectivamente firmaron también un gran debut, al que el base añadió 8 asistencias mientras que el pívot sumó 13 rebotes. Por su parte, Buddy Hield fue el mejor de los suplentes con 17 puntos, y con sus cuatro triples contribuyó a que Barnes no fuera el único en estar acertado desde el perímetro.
Quien no pudo presumir de acierto exterior fue Damian Lillard, que dio comienzo a la temporada fallando los 9 triples que intentó, incluido el que habría forzado la prórroga sobre la bocina, lo que empañó notablemente sus porcentajes (33,3% de acierto) y le impidió poder pasar de los 20 tantos, algo que compensó con sus 11 asistencias. El peso anotador de los Blazers recayó por tanto en C.J. McCollum, quien sí estuvo mucho más fino y logró irse hasta los 34 en una exhibición de recursos, pues el escolta sumó canastas desde prácticamente cualquier distancia. Jusuf Nurkic, con 20 puntos y 14 rebotes, fue el tercer jugador de la plantilla en alcanzar la veintena.
De esta forma, Chauncey Billups se estrenó con derrota en su primer partido oficial, dando continuidad a la mala racha de pretemporada, en la que Portland perdió sus cuatro encuentros. No obstante, el técnico aseguró sentirse notablemente más satisfecho: «En pretemporada llegué varias a la sala de prensa descontento con nuestro esfuerzo y nuestro espíritu. Hoy no es el caso. Hemos luchado, y aunque odio empezar perdiendo, al final esto no es más que un partido. Estoy contento por lo bien que hemos jugado» concluyó.
(Fotografía de portada: Steph Chambers/Getty Images)