La capacidad de DeMarcus Cousins para sumar faltas técnicas está fuera de toda duda. El ahora pívot de Golden State Warriors siempre ha sido de mecha corta, algo que le ha hecho recibir tal señalización en numerosas ocasiones por protestar decisiones arbitrales. Sin embargo, la última de estas, la que le pitaron en el partido ante Charlotte Hornets, llegó de un modo inusual.
Jeremy Lamb, jugador de la franquicia de Carolina del Norte, perdía una de sus zapatillas durante el transcurso del juego. Cousins, quien la encontró en su camino, decidió lanzarla fuera de la pista. Los árbitros le penalizaron con una falta técnica.
A Cousins no le gustó nada tal decisión, algo que poco después corroboró con los medios al explicar que simplemente trataba de evitar una posible lesión. «La próxima vez simplemente la pisaré, dejaré que mi tobillo gire sobre ella, me lo romperé y me destrozaré el tendón de Aquiles. Simplemente lo dejaré ahí la próxima vez. Supongo que eso es lo que quieren. Lo tendré en cuenta».
Su queja ha sido atendido. La NBA, entendiendo que el jugador tiene razón en este percance, ha optado por anular la falta técnica que se le señaló, algo que le salvará de pagar la multa correspondiente, así como de acumular una técnica que pueda tener repercusión al sumarse a otras a lo largo de la temporada.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)