La búsqueda de la falta de tiro ha cobrado niveles inverosímiles durante las últimas temporadas. Sobre todo con jugadores exteriores como protagonistas. Esta secuencia es muy fácil de reconocer. El jugador con balón hace un amago de tiro que provoca el intento de tapón del defensor, ante el cual, el atacante ejecuta el tiro de forma antinatural buscando el contacto que devenga en falta. Esto se ha convertido en un recurso lo suficientemente recurrente como para que la NBA vea necesario limitarlo, proponiéndose esta meta como una de las prioridades para la próxima temporada.
Shams Charania, periodista de The Athletic, ha detallado las directrices que seguirán los árbitros. Estas indican que «el cuerpo de árbitros será entrenado para identificar y actuar apropiadamente ante acciones ‘no baloncestísticas’ que busquen el contacto con el defensor». Algunos de los ejemplos señalados son: lanzarse contra el defensor, cambiar de sentido abruptamente o soltar las piernas durante el tiro. Las faltas al triple han alcanzado la alarmante cifra de 2,6 por partido, según reportaba hace un tiempo Kirk Goldsberry para ESPN. Significando un crecimiento de más del 550% desde la 2002-03.
Con esta medida, la liga espera no solo normalizar este dato, sino localizar los trucos de jugadores expertos en buscar el contacto en penetraciones y otros lances del juego. No es la primera vez que la NBA toma medidas a este respecto, pues ya prohibió la típica patada de Reggie Miller o los amagos de Paul Pierce. Pero la cosa se complica a la hora de tratar casos como los de James Harden, con los cuales ya tuvieron que lidiar largo y tendido en los míticos enfrentamientos de playoffs entre Rockets y Warriors.
(Fotografía de portada de Elsa/Getty Images)