Pau Gasol recibió otra pequeña compensación (aparte de, por supuesto, acabar llevándose el triunfo) a las situaciones vividas en el último derbi entre Lakers y Clippers con Blake Griffin. La NBA ha revisado tres jugadas sucedidas durante el partido entre los dos equipos angelinos, a instancias de los Lakers, y ha decidido sancionar con una falta flagrante de primer grado una de ellas.
Eso sí, no se trata de ninguno de los dos mates que Griffin colocó por encima de Gasol, considerados legales por la NBA tras la revisión, sino una jugada en el tercer cuarto en la que empujó al jugador español cuando iba directo a canasta. Gasol cayó sobre los fotógrafos, pudiéndose hacer daño. La acción se castigó en aquel momento sólo con una falta personal y dos tiros libres.
Mike Brown dejó caer antes del partido ante los Rockets, en declaraciones recogidas por NBAmaniacs.com, que estaba más incómodo con la NBA no castigando las faltas al momento que con el propio jugador. «Si (Griffin) puede hacer esas cosas y es considerado legal, si yo fuera Blake seguiría empujando a gente por detrás y haciendo lo que está haciendo porque está jugando su juego, está haciendo lo correcto. Es una jugada legal a ojos de la liga, así que si fuera él no cambiaría nada».