Allá por el año 1983, Ted Stepien, antiguo propietario de los Cavaliers, traspasó tantas futuras elecciones de Draft que la NBA tuvo que darle elecciones compensatorias tan solo para poder vender la franquicia. Aquel fue un punto de inflexión en la historia de la reglamentación de la liga. A raíz de aquello, se creó una restricción, llamada ‘La Regla Stepien’, la cual consistía en que las franquicias tenían prohibido comerciar con picks de Draft si ello conllevaba quedarse sin ninguno en los Drafts futuros de manera consecutiva.
No obstante, los equipos supieron esquivar dicha medida mediante los intercambios de picks, alcanzando el summum de dicho tipo de operación en verano de 2013. Brooklyn Nets se hizo con los servicios de Kevin Garnett, Pau Pierce y Joe Johnson, hipotecando por completo el futuro del equipo. El equipo nunca fue lo que se esperaba y la franquicia podría estar condenada a vagar por el vacío durante varias campañas más, siendo el peor récord de la competición en la 2016-17 con 20 victorias y 62 derrotas.
Según ha podido saber el portal NBC Sports, la NBA se está planteando limitar estos intercambios y evitar, de este modo, que los equipos puedan tirar por la borda su futuro haciendo apuestas muy arriesgadas por el presente. Es decir, la liga pretende proteger a sus equipos de situaciones que no les permitan ser competitivos a largo plazo. «Han discutido sobre ello. Está en la agenda del comité de la competición, pero aún no se ha debatido con detalle, según las fuentes, afirma Zach Lowe, periodista de ESPN.