Un partido de suspensión. Ese es el castigo que la NBA ha impuesto a Grayson Allen por su dura falta a Alex Caruso, la cual fue castigada durante el partido con una flagrante tipo 2 que causó una fractura de muñeca al guard de Chicago, quien estará unas 6-8 semanas de baja.
El motivo esgrimido por la Liga para multar de este modo al jugador de Milwaukee es un «contacto innecesario y excesivo» a la hora de cometer la falta sobre el rival. La franquicia de Wisconsin no está de acuerdo con la decisión tomada respecto a su jugador.
«No estamos de acuerdo con la suspensión. Apoyamos a Grayson y esperamos que se reincorpore a nuestro equipo para el partido del viernes contra Nueva York», comentan en un comunicado tras conocerse que no podrá jugar el miércoles ante Cleveland.
Cuestionado por esta situación y la acción que ha llevado a ella, Billy Donovan, head coach de los Bulls, entiende que lo mejor que pueden hacer es centrarse en el baloncesto. «Nada ha cambiado desde lo que sucedió la otra noche hasta ahora, y lo mejor que podemos hacer como equipo es seguir adelante. Eso es realmente lo único sobre lo que tenemos control. Me siento mal por Alex porque va a estar fuera mucho tiempo; eso es lo que me hace sentir peor».
La falta flagrante que le señalaron el viernes fue la primera que recibió en contra Allen en toda la temporada, y solo la segunda en su carrera NBA.
(Fotografía de Stacy Revere/Getty Images)