Para una afición necesitada de alegrías, el debut de los Lakers en la Liga de Verano de Las Vegas fue de las mejores noticias recibidas en bastante tiempo. Con un quinteto formado por los cinco jugadores elegidos por la franquicia angelina en los dos últimos drafts, los Lakers gustaron y disfrutaron ante unos difusos Pelicans donde su principal atracción, el escolta Buddy Hield, tuvo un estreno en el universo NBA para olvidar.
Tras una temporada de debut donde prevalecieron los malos recuerdos, D’Angelo Russell fue el general que los Lakers esperaban cuando le eligieron en segunda posición del draft de 2015. La dirección y el descaro del base, quien acabaría con 20 puntos, 11 rebotes, 6 asistencias y 3 robos, dieron un aire nuevo al equipo en el que los recien llegados también mostraron sus mejores virtudes. En la pintura, el pívot croata Ivica Zubac tuvo un prometedor primer partido con 11 puntos, 5 rebotes y 3 tapones, mientras que Brandon Ingram (12 puntos, 4 rebotes y 2 tapones) ofreció algunos detalles especialmente ilusionantes.
Ingram shows a little shake 'n bake into the slam. https://t.co/GLu0hNYrnO
— Los Angeles Lakers (@Lakers) July 9, 2016
Su habilidad para controlar el balón y entrar a canasta funcionaron de forma especial en jugadas de aislamiento. A falta de saber si este tipo de acciones funcionarán también ante rivales NBA de ley, Ingram se mostró como un jugador especial, mezclando su depurada técnica con una capacidad de salto que también le permitió colocar algún tapón para hundir moralmente a sus rivales. Con estos mimbres, los Lakers ganaron con comodidad por 85-65 a unos Pelicans donde el debut de Buddy Hield fue decepcionante.
El talentoso escolta bahameño pareció pagar los nervios de su debut, sin la contundencia ofensiva de sus buenos años en la universidad de Oklahoma. Hield terminó con 13 puntos, a costa de un 5/20 en tiros de campo y un 1/8 en triples, sin nada que ver con el 45,7% que promedió en su última temporada NCAA, añadiendo 4 pérdidas de balón. El buen partido del pívot de Mali Cheikh Diallo, con 11 puntos, 7 rebotes y tapones, no sirvió para ocultar una triste actuación general a cuya costa los Lakers se ganaron una sonrisa nada habitual en los últimos tiempos.