La situación de Kristaps Porzingis se está complicando por momentos. Si su fichaje por Boston Celtics había creado ilusión en ambos bandos, ahora los problemas físicos amenazan con apagar tal efervescencia.
El pívot, quien a principios de verano cerró una extensión de contrato con los verdes por dos años y 60 millones de dólares, estaba preparando con Letonia la disputa del Mundial de baloncesto. Fue allí, con su selección, cuando primero se supo que podía estar lesionado, posteriormente se descartó que fuese así y en última instancia se anunció que se pierde la cita de selecciones por una fascitis plantar.
A través de un comunicado en sus redes sociales, el jugador de 28 años señalaba que se trata de una dolencia que lleva arrastrando tiempo y de la que aún no está plenamente recuperado. Sin embargo, pocos esperaban que el problema fuese tan profundo como para que los Celtics anunciasen que el proceso de rehabilitación podía extenderse durante mes y medio.
Echando números, y aunque Chris Haynes recalca que Boston espera que su jugador esté en plenitud física para realizar el training camp, lo cierto es que puede llegar muy justo al mismo. Exacto, estamos ante el primer contratiempo serio para los de Massachusetts de cara a la temporada 2023-24.
(Fotografía de Patrick Smith/Getty Images)