LaVar Ball no ha querido perder la oportunidad de dar su opinión sobre el traspaso que tuvo lugar anoche y que provoca la llegada de Anthony Davis a Los Angeles Lakers y la salida de Lonzo, su hijo, dirección New Orleans Pelicans.
Tan solo unas horas después de que se completara el movimiento, se lanzó a los micrófonos de ESPN.
«Te lo garantizo: será el peor movimiento que hayan hecho en su vida los Lakers y nunca ganarán otro campeonato», afirmó. «Se van a arrepentir. Me voy a divertir con eso. Como os he dicho a todos, el proyecto se estaba estrellando. Ahora (los Lakers) se han estrellado completamente, pero al menos mi hijo se ha bajado del barco antes de que la cosa explote», concluyó.
LaVar dijo en febrero, antes de la fecha límite de traspasos, que no quería que Lonzo fuera a Nueva Orleans. Si su hijo no podía quedarse en Los Ángeles, comentó, los Phoenix Suns serían una buena opción.
El padre de los Ball fue preguntado sobre si su hijo jugará para los Pelicans, que también cuentan con el base Jrue Holiday. Lonzo se perdió los últimos 36 partidos de la temporada por una lesión en el tobillo, pero ya había estado tirando a canasta y debía comenzar los simulacros de contacto el próximo mes. LaVar afirma que su hijo se siente «genial». «A Lonzo no le importa el traspaso. Él solo quiere jugar. Así que su forma de verlo es la siguiente: ‘Mientras mi pie siga mejorando, jugaré para cualquiera'».
Magic Johnson, el ex presidente de operaciones de baloncesto de los Lakers, creía tanto en Ball que traspasó a D’Angelo Russell, la segunda selección del Draft de 2017, para permitir que Ball se convirtiera en el líder de la franquicia. Johnson declaró en la conferencia de prensa de presentación de Ball que el joven de 19 años algún día tendría el número dos de su camiseta colgado en lo más alto del Staples Center junto con las otras leyendas de los Lakers.
LaVar dijo que los Lakers «serán conocidos por deshacerse de los grandes jugadores», y agregó que «todos los que se escapan de los Lakers, lo hacen mucho mejor después de salir del equipo», dijo, citando a Russell y al ex-Laker Julius Randle.
«No me importa dónde juegue Lonzo», dijo su padre. «Quiero que juegue. Y es mejor ir a algún lugar donde puedas jugar y hacer lo tuyo en lugar de tener todas estas dudas y preguntas sobre tu juego». «Y una vez que no crees en él, es un poco difícil volver y decir: ‘Oh, creemos en él ahora porque ahora no sabemos si lo dices de verdad o no'». Tuviste la primera oportunidad de creer en él y no lo hiciste, así que es hora de irnos», concluyó.
(Foto de portada de Sean M. Haffey/BIG3/Getty Images)