Se ha vuelto a repetir la maldición de LeBron James con los tiros libres en momentos decisivos. Tras un par de fallos en este arranque de temporada, en la victoria del domingo ante Atlanta se volvió a repetir la concatenación de errores. El ’23’ erró desde la línea de personal cuando su equipo (y el partido) menos lo necesitaban. A unos segundos de la conclusión.
Con 105-106 en el marcador a favor de los Hawks, hubo penetración de LeBron que acabó con el natural de Akron fallando dos tiros libres y comprometiendo sobremanera la victoria de su equipo. James patinó en ambos lanzamientos pero Kyle Kuzma se hizo con el rebote para que posteriormente el propio LeBron amarrase la victoria con un mate. Pero el ’23’ no acabó contento el partido, sabe que está viviendo un bajón en los lanzamientos personales cuando el reloj más calienta.
Since the start of last season LeBron is 48% from the free throw line in the final minute of a one-possession game.
That's worst in the league among players with 10+ attempts. pic.twitter.com/ePcCpqsT8s
— SportsCenter (@SportsCenter) November 12, 2018
«Soy basura»
«Soy basura. Apesto desde la línea de tiros libres ahora mismo. Recuperaré mi nivel habitual y doy las gracias a Kuzma por darme esa oportunidad», alegó LeBron James después del encuentro a los medios.
LeBron ha lanzado en 91 ocasiones desde los tiros libres esta temporada, con 67 aciertos (73,6 por ciento). No son cifras para tirar cohetes de por sí, pero Ben Golliver (Sport Illustrated) va más allá y aporta que James es mucho menos efectivo cuanto más apretado está el encuentro.
Lakers' LeBron James at the FT line this season
– 1st Q: 72%
– 2nd Q: 76%
– 3rd Q: 79%
– 4th Q: 74%
– Clutch FTs in last 5 mins: 58%
– Clutch FTs in last min: 44%
– Clutch FTs in last 30 secs: 38%(Clutch = game within 5 points) pic.twitter.com/xnztL7U3OO
— Ben Golliver (@BenGolliver) November 12, 2018
Los datos que arroja Golliver son preocupantes. En los partidos en los que el resultado presenta una diferencia no superior a cinco puntos Lebron desfallece desde la línea. En tales lances, James presenta un 58 por ciento de acierto si los lanzamientos llegan en los cinco últimos minutos de partido. Los resultados se reducen a un 44 por ciento si los intentos son en el minuto final; y su rendimiento todavía desciende más (38%) si son durante el último medio minuto.
Cifras preocupantes que LeBron James, siguiendo la lógica, no tardará en corregir.