Los playoffs de Denver están siendo ejemplo de fortaleza mental y superación. Con dos series decididas en siete partidos, los chicos de Mike Malone han disputado un total de 14 siendo enfrentándose en seis de ellos a la eliminación. La presión no solo no les ha superado, sino que les ha alimentado para mostrar su mejor versión con una pareja de jugones –Jamal Murray y Nikola Jokic– que ha terminado por tumbar a todo un favorito al anillo como Los Angeles Clippers.
Con tal recorrido, no extraña que LeBron James vea en el conjunto de Colorado uno que merezca su total admiración. «Es un equipo muy resistente, muy confiado, muy motivado, muy bien entrenado. Se necesita mucha energía, esfuerzo y jugar con mucha desesperación para poder levantar un déficit de 3-1. Lo hicieron dos veces. Así que el nivel de respeto que tenemos por ellos está fuera de este mundo. Así es cómo vamos a entrar en esta serie: comprendiendo de lo que son capaces y en qué posición se encuentran».
Si hay una pieza que ha recibido elogios en los últimas días esa es Nikola Jokic. El pívot serbio parece tener la exclusiva cualidad de saber en todo momento qué hacer. En partidos en los que los Nuggets han estado algo atascados, ha anotado con una facilidad asombrosa. En otros en los que las defensas se ceñían sobre él, ha sabido distribuir para que fuesen otros los que sumasen. Para LeBron la mayor cualidad del pívot es que es un jugador de equipo. «Cuando ves que el mejor jugador del equipo, uno de los mejores, juega sin preocuparse en absoluto por sí mismo pensando únicamente en lo que necesita el equipo, eso envía un mensaje al resto del grupo», señala.
Por último, evitó valorar la eliminación de Los Angeles Clippers. Vio el partido, pero solo pensando en que alguno de los dos sería su rival en las finales del Oeste. «Realmente no tengo un comentario al respecto Estaba simplemente sentado y viendo el partido desde la perspectiva de un aficionado, viendo que se hacen grandes tiros, grandes jugadas, tiros fallidos… cosas de esa naturaleza. También lo seguí como ojeador, explorando a ambos equipos al mismo tiempo».
(Fotografía de Mike Ehrmann/Getty Images)