Si quedaba algún resquicio por el que los Raptors quisieran colarse para nivelar su serie ante Cleveland, esta noche LeBron James ha tapado todos los agujeros. Una impresionante canasta sobre la bocina del considerado mejor jugador del mundo ha dado el triunfo a los Cavs por 105 a 103 y Toronto ahora se ve abajo 3-0, una diferencia que ningún equipo ha remontado en la historia de la NBA.
La acción final de James fue de tal magnitud que el recuerdo de este tercer partido de la eliminatoria quedará reducido simplemente a la canasta final. Tras empatar el partido Toronto a falta de 8 segundos para el final merced a un triple de O.G. Anunoby, llegó el turno de LeBron. James subió el balón desde su cancha, encaró el flanco izquierdo del ataque y saltando a una sola pierna tras llegar en carrera lanzó a tabla con una sola mano.
La pelota entró limpia justo cuando sonaba la bocina. “Al final de los partidos solamente hay que dar la pelota a Bron”, dijo Tyronn Lue.
LEBRON. CALLED. GAME. 👑 #SCtop10 pic.twitter.com/gs1OHrKFPq
— SportsCenter (@SportsCenter) 6 de mayo de 2018
Devastador para los Raptors. Celebración inmensa para los Cavaliers, cuyos jugadores corrieron a abrazar y empujar al hombre que está salvando una temporada que se suponía que había descarrilado unas cuantas veces. Pero con LeBron James en el equipo la posibilidad de llegar a unas Finales de la NBA por cuarto año consecutivo es real en Cleveland.
“Le he visto meter esa canasta incontables veces en entrenamientos y sesiones de tiro”, dijo Kyle Korver sobre James. “Siempre me pregunto, ¿por qué tiraría un tiro así para ganar un partido de playoffs? Es una jugada increíble. Está inmenso en esos momentos todo el año”.
38 puntos, 7 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y 1 tapón fueron las estadísticas finales de un James que, evidentemente fue el mejor jugador de la noche. Kevin Love añadió 21 puntos y 16 rebotes y Kyle Korver sumó 18 tantos y George Hill 12. El entrenador que usó una rotación de 9 jugadores —Larry Nance Jr. y José Calderón no jugaron ni un minuto— y solo 6 jugadores de los Cavs sumaron algún punto. Pero así bastó.
La bestia negra de Toronto
Los Raptors siguen hundiéndose ante LeBron James. Tras completar la Temporada Regular con la mejor marca de la Conferencia Este, Toronto se está descomponiendo contra los Cavaliers. Lo peor es que la película vuelve a repetirse y con la de esta noche ya son nueve —sí, nueve— derrotas consecutivas ante Cleveland en playoffs. Los canadienses no son capaces de ganar un partido a los de Ohio desde hace mucho y la marca contra ellos en los tres últimos playoffs es de 2-11.
El máximo anotador de Toronto fue Kyle Lowry, autor de 27 puntos y 7 asistencias. El rookie O.G. Anunoby hizo un buen partido al lograr 18 puntos, C.J. Miles sumó 13 tantos y Serge Ibaka, suplente esta vez, aportó 11 puntos y 8 rebotes.
La otra peor noticia para Toronto aparte de la derrota fue la escasa aportación de DeMar DeRozan, quien se quedó en 8 puntos con 3 de 12 en tiros de campo. A DeRozan se le vio con tantos problemas que incluso Dwane Casey decidió dejarle en el banquillo durante el último cuarto, algo que el jugador calificó como “muy duro”.
Derrota por un punto en la prórroga en el primer partido, imposible de contener a LeBron en el segundo y derrota por dos puntos sobre la bocina en el tercero. Está siendo una serie cruel para los Raptors.
“Me recuerda a los días en los que haba que pasar sobre la barrera de Jordan”, dijo Casey sobre a lo que se está enfrentando su equipo. “En algún momento tienes que poder superar la valla, tirarla abajo”.
El cuarto partido de la serie se disputará el lunes por la noche en The Q, momento en el los Cavs tendrán la primera oportunidad de eliminar a su rival otra vez, la cual seria la tercera eliminación consecutiva de Toronto a manos de Cleveland. Como recuerda NBA Stats, de 129 ocasiones en las que un equipo se ha visto 3-0 por debajo en una eliminatoria en ninguna ocasión ha conseguido remontar. Solo tres conjuntos llegaron al 3-3, pero no parece que este vaya a ser el caso de unos Raptors dominados mentalmente por su rival.