LeBron James confirma lo que ya sabíamos. Cleveland, una vez comiencen los playoffs, será tan candidato al título como cualquier otro sin importar los partidos ganados en Temporada Regular ni el puesto conseguido en la misma.
El tres veces ganador de la NBA, quien está viviendo una convulsa campaña en la que se incluyen récords negativos del equipo y una revolución en la plantilla, está seguro de que las posibilidades de los Cavs en la postemporada no dependen de si consiguen o no ventaja de campo, sino de ser mejores.
«Debemos ir mejorando y en el camino ganarás y perderás partidos. No me importa si soy sexto, tercero, segundo, octavo… Si llego a tu casa para disputar un Game 1… va a ser un gran desafío», comenta a los medios.
Redoblando esfuerzos
Los Cavaliers viven solo con 1,5 partidos de ventaja sobre el quinto puesto; es decir, la opción de empezar la postemporada en la carretera es real. Por ello, y aunque El Rey diga que le da igual que eso ocurra, lleva semanas rindiendo al que podemos definir como el mejor nivel de su carrera, tanto que febrero ha sido el primer mes que concluye con una media de triple-doble.