Fiel a su exitosa historia, la selección de Lituania se ha metido en la final del Eurobasket, reeditando lo hecho en la edición de 2013, y asegurando además estar presente en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Para conseguirlo tumbó a Serbia, actual subcampeona del mundo e invicta hasta las semifinales del torneo, por 64-67.
La seriedad y el trabajo de los lituanos tuvo recompensa en semifinales. Pese a contar quizás con menos talento que su rival. Pese a tener menos profundidad de banquillo (Mantas Kalnietis acabó exhausto tras disputar 37 minutos). Pese a todo ello Lituania salió desde el primer cuarto dominando y, lo que es más importante, sin dejar jugar a su rival.
Con esa fortaleza defensiva como premisa fundamental, los lituanos pronto cobraron ventaja en el electrónico para finalizar el primer cuarto cinco puntos arriba (17-22). Esa buena línea de juego, liderada por la fortaleza interior de Jonas Valanciunas, autor de 15 puntos, les sirvió para conseguir una máxima ventaja de 11 puntos (21-32); sin embargo, todo ese esfuerzo quedó en nada en los últimos tres minutos, tiempo en el que Serbia firmó un parcial de 9-0 para irse al vestuario con un solo punto de desventaja (34-35).
Tras el descanso el panorama cambió poco. Las pérdidas de balón y los fallos en el tiro eran una constante, sobre todo en Lituania, que acabaría perdiendo 20 balones, y que vio como su rival tomaba ventaja (43-40) ayudado por los cinco minutos que estuvieron sin conseguir un solo punto. Esa renta parecía que le daría cierto aire a los subcampeones del mundo, pero la realidad fue bien distinta. Precipitados por querer abrir brecha y cerrar el partido, los hombres de Djordjevic volvieron a verse por detrás (43-48) y ya no serían capaces de darle la vuelta.
Los últimos 10 minutos fueron una lucha constante entre el corazón serbio, que quería pero no podía, y la ilusión y agonía lituana, que pese al cansancio de sus jugadores, sobre todo de Kalnietis, que dio casi tantas asistencias como balones perdió, 9 por 8, aguantó hasta plantarse a falta de 23 segundos con cuatro puntos de ventaja (61-65). Justo en ese momento, cuando todo estaba casi perdido, apareció Milos Teodosic, que acabaría con 16 puntos, para firmar un triple a falta de 14 segundos que contestaba al acierto de Renaldas Seibutis desde el tiro libre, dejando a su equipo a un solo punto.
De nuevo desde la personal, y con 12 segundos por jugar, Seibutis erró su segundo lanzamiento y dio a Serbia la posibilidad de igualar o ganar, con un triple, el partido. Nada de eso ocurrió, la precipitación volvió a hacer acto de presencia, esta vez encarnada en Bogdan Bogdanovic, que se lanzó a por el aro lituano esperando una falta que no llegó. Así, tras un nuevo fallo desde el tiro libre de Maciulis (9 puntos y 6 rebotes), y con una desventaja de tres puntos, Serbia, sin tiempo, perdió la bola y quedó fuera de la final. Una final que disputarán el domingo España y Lituania.
Atando a Serbia
Serbia, que llegaba a las semifinales del campeonato con un promedio de 88 puntos por partido, fue incapaz de superar el entramado defensivo Lituania en todo el partido; muestra de ello son los 64 puntos que terminó anotando.
Lituania, siempre en los JJ.OO.
Cuatro veces finalista del Eurobasket (1995, 2003, 2013 y 2015), la selección lituana tiene el privilegio, así como el honor, de decir que ha participado en todas las ediciones de los Juegos Olímpicos desde la disolución de la URSS en 1991; es decir, acumula siete presencias consecutivas en la disputa de dicho torneo.