Mientras los playoffs de la temporada 2016-17 no han llegado todavía a su ecuador, las 30 franquicias de la NBA ya empiezan a afrontar la primera cita importante del verano. El draft que se celebrará el día 22 de junio llega con la etiqueta de ser uno de los más llenos de talento de los últimos años, por lo que el trabajo será más intenso que nunca para evaluar a todos los talentos disponibles. O, al menos, a los que se dejen evaluar.
Ball no estará en Chicago
La NBA ha repartido ya las invitaciones a los jugadores elegidos para participar entre el 9 y el 14 de mayo en el Draft Combine, la cita anual que reúne a ejecutivos y ojeadores en Chicago para ver de cerca y entrevistar a más de 60 candidatos al draft. Eso sí, como ha sido habitual desde 2014, algunos de los favoritos al número 1 pueden declinar su asistencia. En la edición de este año, la primera baja es la de Lonzo Ball.
Según ESPN, el base procedente de UCLA no participará en el Draft Combine, reservándose presumiblemente para los equipos que tengan las posiciones de honor en el draft tras la lotería del 16 de mayo. Otros candidatos a ser números 1 como Markelle Fultz o Josh Jackson también podrían seguir sus pasos eludiendo completamente el evento, o al menos no participando en algunas de las actividades habituales, como los partidos de cinco contra cinco o las pruebas físicas.
Una tradición reciente
Para otros jugadores, el evento es mucho más importante. Su necesidad de dejar una buena imagen a la mayor parte de franquicias posibles, ya sea para mejorar su posición teórica o incluso para colarse en el draft, hará que sí completen las diferentes actividades del Draft Combine para aumentar su cotización.
El caso de Lonzo Ball no es en absoluto una rareza en los últimos años. Sin ir más lejos, en la edición de 2016 faltaron jugadores de la importancia de Ben Simmons (posteriormente elegido como 1º del draft), Domantas Sabonis (11º) o Dejounte Murray (29º). En 2014, Andrew Wiggins, Jabari Parker y Joel Embiid fueron los primeros jugadores de primer nivel rechazaron su invitación al Draft Combine, una decisión sorprendente que no les impidió acaparar el Top-3 del draft mes y medio después.
Entrenamientos pre-draft en marcha
Independientemente de este evento, algunas franquicias ya han empezado a programar entrenamientos privados para ver de cerca a los jugadores que esperan entrar el próximo año en la NBA. Utah y Atlanta abrieron la veda este mismo sábado. Los Jazz invitaron a Andrew Jones, T.J. Williams, Rodney Purvis, Zak Irvin, D.J. Wilson y Tyler Cavanaugh, mientras que los Hawks hicieron lo propio con Aaron Holiday (hermano de los NBA Jrue y Justin), Kyle Kuzma, Jaylen Adams y el dominicano Ángel Delgado.