Los Bucks de un gran Antetokounmpo fuerzan el séptimo partido

Quizá no haya sido la última noche del Bradley Center, pero si los Bucks cayesen eliminados este sábado en el séptimo partido contra los Celtics, en Boston, el vetusto pabellón al menos podría despedirse de la NBA con un triunfo de Milwaukee y otra exhibición de Giannis Antetokounmpo. Quieren más partidos los de Wisconsin, quieren jugar más en el Bradley Center antes de que sea historia al final de la campaña.

Para que eso suceda deberán doblegar en el Game 7 a los Celtics, tras forzar este jueves el 3-3 en la eliminatoria después de un sobrio triunfo sobre Boston (97-86). Todo se decidirá pues en TD Garden, sin margen de error, sin red, sin nada. Perder es irse de vacaciones y ganar es acceder a las semifinales del Este. No hay más ecuaciones.

Antetokounmpo guía a los Bucks

Al final de encuentro, en los segundos de la basura y con todo decidido, el ala-pívot heleno era cambiado. Agotado, permaneció todavía unos instantes más en la butaca mientras que el resto de compañeros celebraba el triunfo. Lo decía Giannis Antetokounmpo, que en este sexto partido debía salir más fuerte todavía. Acabó con 31 puntos, 14 rebotes, 4 asistencias y 2 robos en 41 minutos. Y eso que empezó fatal en la parcela anotadora, con solo 2 tantos y un pobre ¼ en tiros en el primer cuarto. Era la tónica de Milwaukee, que en esos 12 minutos iniciales llegó a ir 15-24. Entonces, un 7-0 liderado por Jabari Parker, que aportó 5 puntos, apretó el electrónico (22-24).


Las imprecisiones, las idas y venidas de los dos planteles, comunes a lo largo de toda la serie, no podían faltar en el sexto partido. Tras el primer cuarto, Boston metió una marcha más y pareció escaparse por momentos. El 24-31 empezaba a ser incómodo para los locales, sin margen de error pero sí de mejora. La tuvieron. Del 24-31 al 48-39 con el que el asunto se fue al vestuario se llegó primero por un parcial de 8-0 de los Bucks, posterior a un tiempo muerto, y luego, globalmente, por otro parcial de 26-10.

Máxima renta de Milwaukee… y casi remontada de Boston

Las remontadas no se culminan hasta que no te pones por delante. Eso le faltó a Boston, equipo totalmente acostumbrado durante este curso a irse al descanso con una clara desventaja y luego darle la vuelta a todo. Sí, en esta ocasión también pudimos pensar que era así. Los Bucks tuvieron la máxima de la noche, 55-41 en el tercer cuarto y entonces un 8-16 de los visitantes, entre otras cosas, puso parejo el marcador (61-59). Nadó Boston otro poco más para empatar la contienda a 61 y dejar todo abierto con 16 minutos por celebrarse.

Sin embargo los de Joe Puntry probaron el filo de la navaja pero no se cortaron. Devolvieron el golpe con un 6-0 que les disparó hacia el posterior 74-65 con el que se acababa el cuarto. Bien llevados por Malcolm Brogdon (16 puntos, 6 rebotes y 2 asistencias) y con Antetokounmpo dominando la situación, el resto del encuentro se convirtió en un quiero y no puedo de los Celtics, a pesar de los esfuerzos de Marcus Morris, de Terry Rozier o del mejor de los de Brad Stevens, un Jayson Tatum que firmó 22 puntos.

El sábado última bala para ambos equipos, dentro de una eliminatoria sin triunfos visitantes. Tanto Boston como Milwaukee han cimentado el 3-3 en su feudo. El TD Garden, el hogar de los Celtics, hablará en menos de 48 horas.


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.