¿Quién para a estos Bulls? De momento, Hornets, Knicks, Celtics, Jazz, Bucks y 76ers no han podido frenar a Chicago en este mes de diciembre. Los Bulls sumaron anoche ante su público su sexta victoria seguida. Lo hicieron frente a Philadelphia, en la vuelta de Lauri Markkanen y con Nikola Mirotic, Bobby Portis y Kris Dunn como estiletes (117-115).
Desde que volvió Mirotic a escena, los Bulls suman 6-0 de balance. Ayer, el ala-pívot fue decisivo con un triple en el último minuto, aunque su desacierto posterior en el tiro libre dio un último balón de oxígeno a los Sixers, en la figura de un Ben Simmons que no pudo enviar el duelo a la prórroga. ¿Adivinan quién cerró el rebote y se quedó con la pelota? Sí, el nuevo talismán de los Bulls. Sí, Mirotic. El ex del Real Madrid acabó con 22 puntos y 13 rebotes.
Nikola Mirotic is a man possessed. ? pic.twitter.com/CCAQIgb8Ls
— Chicago Bulls (@chicagobulls) 19 de diciembre de 2017
A la senda del doble-doble se le unió Portis, perfectamente conjuntado con quien fue su rival no hace demasiado… cuando compartían vestuario. Ya saben. Todo aquello ha quedado sobradamente superado en la pista. Portis, que al igual que Mirotic salió de suplente, hizo 12 puntos y 10 rebotes. Kris Dunn, 22 tantos, 4 rebotes, 6 asistencias y 2 robos completó el trabajo de sus compañeros suplentes.
Philadelphia, en un bache y récord negativo
Un balance de 3-7 en los últimos diez duelos, dos derrotas seguidas y los playoffs a 1,5 partidos de distancia. No parece una diferencia insalvable, pero lo cierto es que los 76ers han caído en récord negativo (14-15) y han perdido algo de la finura que les llevó, no hace demasiado, a estar fuertes en las zonas nobles del Este. Anoche, eso sí, no tuvieron a Joel Embiid con ellos y cayeron por detalles, aunque el empujón final de los Bulls para vencer tiene que ir en la lista de culpas de Philadelphia.
Ben Simmons rozó el triple-doble con 19 puntos, 11 rebotes y 9 asistencias. Él y Dario Saric, 27 tantos, 8 rebotes, 1 asistencia y 2 robos, fueron los más destacados de unos Sixers que tampoco pudieron con el ciclón de la Ciudad del Viento. Unos Bulls desconocidos y que con 9-20 hace tiempo que ha dejado de ser el peor plantel de la NBA.