Ya están aquí, definitivamente. Les ha costado coger el tono, les ha costado hacerse a las bajas y a un inicio de curso complicado, pero los Cavaliers vuelven a ser ese equipo casi infalible en el Este. Una conferencia que se antojaba como la débil este verano pero que promete darnos una batalla muy bella entre Cleveland, los potentes Celtics y los esperanzadores Pistons.
Y en ese combate ya están los Cavs principalmente porque se han hecho a la saludable práctica de ganar. Concretamente, diez partidos seguidos, un balance bueno de 15-7 y solventado el desastre que parecía cernirse sobre la entidad de Ohio, cuando el récord era negativo y no había más que nubes en una plantilla incapaz de hacer de la defensa un trabajo estable. Los días del 5-7 tras la derrota en su visita a Houston han quedado atrás, muy atrás, aunque no haga ni un mes de todo aquello.
Victoria sobre Atlanta (114-121)
La decena de triunfos seguidos de los Cavs se dio este jueves en Georgia, con esfuerzo, con sudores. Los Hawks, uno de los peores equipos de la NBA con sólo cuatro victorias en su casillero, llegaron a marcharse por delante al descanso (67-63). Atlanta ha perdido a Dewayne Dedmon por un periodo de entre 3 y 6 semanas, malas noticias para una franquicia que sin embargo mostró buena cara ante los subcampeones de la NBA. Dennis Schroder sigue siendo el mejor de un equipo que puede contar con aportes desde el banquillo como los de Marco Belinelli, 18 tantos, o de Ersan Ilyasova, 22 puntos y 4/6 en triples.
Tonight we set a season high in 3-pointers made (18) and assists (30).
Watch every trey drop in Atlanta!#AllForOne pic.twitter.com/lqHTQkC846
— Cleveland Cavaliers (@cavs) 1 de diciembre de 2017
Claro que todo eso se queda corto si el rival, tercero ya del Este, establece el récord de triples de la temporada (18) y de asistencias (30). LeBron James y Kevin Love, demostrados como los jugadores más en forma de los Cavs, siguen haciendo de las suyas. LeBron, además de dejar un par de acciones en defensa y en ataque bastante contundentes, acabó con otro doble-doble: 24 puntos y 12 asistencias, redondeados con 6 rebotes, 2 robos y 2 tapones. Eso, y las jugadas que desmoralizaron al rival. Porque un triple suyo a menos de dos minutos para que acabara el partido puso el 112-116 en el electrónico. Luego remató la faena con un tapón a Schroder que enterraba las pocas esperanzas de los Hawks.
.@KingJames gives Atlanta the finger-wave after another HUGE block! ☝️ pic.twitter.com/DDqzLZVg9D
— NBA TV (@NBATV) 1 de diciembre de 2017
Love, por su parte, cosechó también doble-doble, igualó su mejor registro de tapones del curso (16) y puso en su casillero 24 puntos y 4/9 en triples. De los suplentes, bien Dwyane Wade, quien recientemente ha reconocido que se ha adaptado muy bien al cambio de rol de titular a jugador de banquillo, o Jeff Green. Flash dejó una hoja de 19 puntos, 2 rebotes, 3 asistencias, 4 robos y 2 tapones; Green, 12 tantos, 3 capturas, 2 pases de canasta, 1 balón sustraído y 1 tiro rival interceptado.
Lebron, en el Top-10 de tiros de campo anotados
Otro apartado en el que James sube peldaños. Tras el duelo contra los Hawks, LeBron se coloca como el 10º jugador de toda la historia de la NBA en tiros de campo convertidos. Los 10.663 que suma le sirven para superar a Alex English (10.659) y para tener muy cerca la 9ª posición, en manos de Hakeem Olajuwon (10.749).