El hechizo de los Clippers en el mejor inicio de temporada de la historia de la franquicia se rompió momentáneamente en Detroit. El equipo angelino, líder hasta entonces en la NBA, sufrió su tercera derrota de la temporada ante unos Pistons que mostraron las señas de identidad de sus mejores años: espléndido juego de equipo y aguerrida defensa. Buena receta para un triunfo por 108-97 que les permite dormir en la zona de Playoffs con un balance de 8-9.
Resaca dolorosa
Scoring first in style … or should we say #DetroitStyle. #PistonsNow pic.twitter.com/rb1ZDm0acZ
— Detroit Pistons (@DetroitPistons) November 26, 2016
Para Detroit, hasta entonces, no había sido día de buenas noticias. La franquicia había anunciado previamente que Reggie Bullock sería baja indefinida por un desgarro de menisco y que Stanley Johnson, uno de sus jugadores con más potencial, había sido suspendido por el propio equipo por «violar las normas del equipo». Pero, pese a todo, el equipo entrenado por Stan Van Gundy salió dispuesto a plantar cara a un rival que estaba en plena forma.
Los Clippers, eso sí, salieron faltos de ritmo, tras haber pasado el festivo Día de Acción de Gracias viendo a los Cowboys antes de volar a Detroit. En el primer cuarto, en el que los Pistons dominaron por 37-25, quedó claro que no iba a ser su mejor día. Tobias Harris y Andre Drummond hicieron daño desde el principio, liderando a un quinteto inicial en el que sus cinco jugadores anotaron entre 15 y 17 puntos. El trabajo distribuidor de Kentavious Caldwell-Pope (10 asistencias) e Ish Smith (7 asistencias) desmoronó la tibia defensa de los Clippers.
Redick apretó sin éxito
JJ can't stop. JJ wont stop.
We've got a battle at the Palace with the @DetroitPistons. pic.twitter.com/9rWedFGjlD— LA Clippers (@LAClippers) November 26, 2016
En el lado angelino, Blake Griffin (24 puntos) y Chris Paul (8 puntos y 15 asistencias) llevaron de primeras el ritmo del equipo, pero insuficiente para salvar la temprana ventaja de unos Pistons que llegaron a ir 18 arriba en la primera mitad. En el tercer cuarto, eso sí, los Clippers se engancharon al partido gracias a uno de los tiradores más en forma de la liga.
J.J. Redick no solo sumó su 73º partido consecutivo de temporada regular con al menos un triple (racha activa más larga de la liga), sino que su segunda mitad casi le da la remontada en Detroit. El escolta anotó 22 de sus 24 puntos tras el descanso, perfectamente asistido por Chris Paul. Los Clippers llegaron incluso a ponerse por delante en el último cuarto, hasta que Detroit despertó. Marcus Morris (11 de sus 16 puntos en los últimos 12 minutos) y la defensa de los Pistons acabaron dictando sentencia.
De gira
Detroit consiguió así una valiosa victoria antes de embarcarse en una gira de cuatro partidos fuera del Palace de Auburn Hills, el que seguirá siendo su hogar hasta 2018. Por su parte, los Clippers ya andan en la carretera en medio de una tanda de seis partidos fuera de Los Angeles con un balance provisional de 1-1. Sus próximas visitas a Indiana (con Paul George de baja por los Pacers) y Brooklyn serán sus primeras oportunidades para recuperar el sabor de la victoria.