Algo menos de una semana ha durado Kemba Walker como jugador de los Detroit Pistons. Después de llegar traspasado desde los Knicks en la noche del draft solo parecía cuestión de tiempo que franquicia y jugador acordasen una rescisión de contrato. Adrian Wojnarowski acaba de informar de que esta ya es oficial. Al contrato de Kemba le restaba un año a razón de 9,2 millones de dólares. El jugador cobrará este salario íntegro en la 2022-23, ya que Detroit prefiere absorber su ficha este año y liberar un espacio en plantilla para no comprometer espacio salarial futuro.
Hace un año firmar a Kemba Walker por dos años y 17,8 millones de dólares parecía un rotundo acierto. Sin embargo, las cosas en New York nunca llegaron a funcionar y el valor de mercado del base ha vuelto a recaer un año más. De momento no existen rumores que le involucren con ninguna franquicia en concreto, pero algunos insiders insinúan que firmará por el mínimo de veterano. En su caso, esa cifra parte de los 3 millones anuales.
Este curso Walker ha llegado a ser apartado de la rotación en dos ocasiones por Tom Thibodeau. Dejándole con tan solo 37 partidos disputados en los que ha promediado 25 minutos, 11,5 puntos y 3,5 asistencias. Si pasan 48 horas sin que nadie reclame su actual contrato, pasará a ser agente libre sin restricciones.