Los Grizzlies igualan la serie pese a la baja de Morant

Los Grizzlies están muy vivos. Pese a que Ja Morant confirmó las malas sensaciones y no pudo estar presente en el segundo partido de la primera ronda de playoffs, sus compañeros dieron un paso adelante y lograron igualar la serie antes de que esta viaje a Los Ángeles. El cuadro de Taylor Jenkins se impuso por 103-93 a unos Lakers a los que, a ratos, fue muy superior, demostrando que sus virtudes siguen estando ahí a pesar de las bajas.

Si en el Game 1 los californianos vieron cómo varios de sus hombres secundarios brillaban más de lo habitual, esta vez fueron los locales quienes contaron con dicho lujo. Xavier Tillman no pudo elegir mejor noche para jugar el mejor partido de su carrera, pues con 22 puntos batió su récord anotador en la NBA y lideró en anotación a los Grizzlies, en los que hasta seis hombres terminaron en dobles dígitos. El pívot, titular en ausencia de Steven Adams, fue también fundamental en la pelea por el rebote, haciéndose con 13 capturas, 5 de ellas en ataque, que hicieron a su equipo ganar la batalla bajo los tableros.

Jaren Jackson Jr. y Desmond Bane, con 18 y 17 tantos, le siguieron de cerca en esta materia, aunque lo cierto es que si algo permitió a los de Tennessee imponerse fue su buena labor defensiva. Los Lakers tuvieron serios problemas para ser consistentes en ataque, y a ratos volvió a verse su versión menos fluida y atascada gracias a la buena labor de los de Jenkins, que entendieron que, sin su estrella para guiarles en anotación, sus opciones crecerían si el partido se jugaba a pocos puntos.

Este buen trabajo les llevó a colocarse 20 arriba en los primeros compases del tercer cuarto (66-46), aunque fue a partir de ese momento cuando los visitantes comenzaron a despertar. Con Rui Hachimura de nuevo como agitador anotando 11 de sus 20 tantos en el tercer cuarto, el conjunto angelino buscó recortar distancias y volver al partido, pero, aunque la diferencia se redujo, nunca llegaron a respirar de verdad en la nuca de Memphis. Su inconsistencia ofensiva les privó de encadenar un parcial favorable con el que equilibrar las cosas, y el acierto final de los locales se encargó de dejar todo sentenciado a falta de un par de posesiones.

LeBron James, con 28 puntos, fue la gran referencia de los suyos, pero, exceptuando a Hachimura en el tercer cuarto, la contribución de sus compañeros fue bastante escasa. Anthony Davis tuvo muchos problemas para encontrarse cómodo en la pintura y se quedó en 13 tantos tras firmar un pobre 4/14 en el tiro, mientras que Austin Reaves no logró ofrecer su versión brillante del Game 1 y no pudo pasar de los 12. Menos acertado estuvo aún D’Angelo Russell, cuyo 2/11 en el lanzamiento le impidió pasar de los 5 tantos.

Los de Ham regresan por tanto a casa con un sabor agridulce que combina la satisfacción de haber robado el factor cancha con la decepción de haber dejado escapar la oportunidad de poner a su rival contra las cuerdas. Veremos si Morant está listo para el Game 3 y consigue con su presencia dar un nuevo impulso a los suyos, que se han aferrado a la vida en una noche que se presentaba muy complicada y que han sacado adelante con nota. Ahora, les toca tratar de convertirla en un punto de inflexión.

(Fotografía de portada: Justin Ford/Getty Images)


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