El final de temporada de los Hawks se complica día a día. A su inconsistencia permanente en esta temporada (actualmente en plena racha de tres derrotas seguidas tras ganar los tres partidos anteriores), el equipo de Mike Budenholzer ve como las lesiones están afectando a su quinteto inicial. En los próximos partidos, el entrenador de Atlanta no podrá disponer de dos jugadores claves en su esquema como Paul Millsap y Kent Bazemore.
Ausencias notables
El ala-pívot, All-Star en las últimas cuatro temporadas, se perderá al menos los dos próximos partidos a domicilio en Charlotte y Washington por unas molestias en la rodilla izquierda. Su baja es especialmente dolorosa por su importancia a ambos lados de la cancha. Esta temporada, Millsap es líder en anotación del equipo (18,1 puntos por partido), y segundo en el resto de categorías estadísticas importantes: asistencias, rebotes, tapones y robos.
A esta baja se le suma la de otro jugador polivalente e importante en la defensa como Kent Bazemore. El alero tiene una contusión en su rodilla derecha y será reevaluado en un plazo de entre 7 y 10 días. Incluso en el plazo más optimista, Bazemore se perderá varios partidos fundamentales para asegurar una buena posición para los Hawks, actualmente en la quinta plaza del Este con un balance de 37-32.
Inquietud en la clasificación
El problema para Atlanta es que, hoy por hoy, está en tierra de nadie entre el cuarto puesto (Toronto, con 41-29) y el noveno (Miami, con 34-36). Otra mala racha podría colocarle de lleno peleando por su supervivencia ante equipos que han entrado en las últimas semanas de competición con un hambre especial para alcanzar los playoffs. Perder a Millsap y Bazemore, aunque sea a corto plazo, puede tener consecuencias importantes para un proyecto en trayectoria descendiente respecto a las últimas temporadas.