Un espléndido último cuarto en el que anotaron 35 puntos bastó para que los Atlanta Hawks frenaran a los Portland Trail-Blazers por 105-99 y consiguieran su 18ª victoria consecutiva para ampliar el récord de la franquicia. El equipo de Budenholzer ya no sorprende a nadie, y el resto de la liga visita el Phillips Arena sabiendo qué estilo de juego plantean los Hawks. Sin embargo, la racha de victorias sigue, lo que demuestra el potencial de la franquicia de Atlanta.
Esta noche, los Hawks volvieron a exhibir su juego más equilibrado y solidario en ataque, con seis jugadores superando los dobles dígitos y la pareja interior Millsap-Horford liderando la anotación con 21 y 17 puntos respectivamente. Además, ambos capturaron 8 rebotes.
Atlanta ya es el mejor equipode la NBA; números de impresión.
Por parte de Portland, Lillard trató de reivindicar su merecimiento a disputar el All-Star después de hacer pública su frustración. El base estuvo poco acertado y acabó con un mal porcentaje de 6-20 en sus lanzamientos. Además, perdió 6 veces el balón, completando un partido en el que trató de hacer demasiado. Sí estuvo mucho mejor Aldridge, con 37 puntos y 15-24 en tiros, añadiendo también 11 rebotes. Su tiro de media de distancia funcionó toda la noche pero aun así no pudo dar la victoria a su equipo.
La importancia de Bazemore
La gran noticia del partido fue la contribución de Kent Bazemore. DeMarre Carroll no pudo disputar el partido y su sustituto, Thabo Sefolosha, se lesionó a los dos minutos de empezar el encuentro. Bazemore fue el encargado de recoger el testigo y jugar 40 minutos para aportar 12 puntos y buena defensa.