Sacramento continúa confirmándose como una de las sorpresas positivas de la temporada. Aprovechando las dificultades de los Pelicans con las lesiones, los Kings han arrebatado a los de Luisiana la tercera plaza del Oeste con su victoria de esta madrugada en el Crypto.com Arena, donde se han impuesto a los Lakers por 111-116. Con esta, los californianos suman cinco triunfos consecutivos, y dan continuidad a una escalada clasificatoria que está superando las expectativas más optimistas.
Los de Mike Brown se llevaron el choque a pesar de no poder contar con Domantas Sabonis, que fue baja debido a un problema estomacal y cedió el protagonismo ofensivo a De’Aaron Fox, que aceptó con gusto los galones. Con 31 puntos y 6 asistencias, el base comandó a los suyos de principio a fin, aportando además su habitual determinación en el clutch para sumar varias canastas que ayudaron a cerrar el duelo. En este aspecto fue también fundamental Harrison Barnes, segundo en anotación con 20 tantos y autor de un 2+1 a falta de 50 segundos que rompió el empate en el marcador.
«Domantas es parte clave de nuestra ofensiva, y Fox ha sabido dar un paso adelante sensacional» comentó Brown al terminar el choque. «Nos ha devuelto al partido cuando estábamos por debajo y ha sabido ponernos por delante en el tramo final. Pero esta ha sido una victoria de equipo. Llevamos todo el año diciendo que sentimos que somos una plantilla muy profunda. Si alguien falla, el siguiente en la rotación está listo para asumir su puesto».
Este fue el caso de Richaun Holmes, que tras una temporada en la que ha tenido un rol muy minoritario en el equipo, arrancó como titular por primera vez y lo hizo cumpliendo a la perfección. El pívot terminó con un doble-doble de 16 puntos y 11 rebotes tras firmar un 100% de efectividad en sus lanzamientos, incluyendo dos tiros libres en los segundos finales que calmaron los ánimos locales y despejaron cualquier atisbo de remontada.
De nuevo sin ideas
Los Lakers pelearon hasta el final comandados por LeBron James, que con 32 tantos, 9 asistencias y 8 rebotes se quedó a las puertas de un nuevo triple-doble y mantuvo a los suyos con vida hasta los últimos segundos, donde no encontró manera de obrar el milagro. El ataque de los locales a la hora de la verdad fue desesperantemente ineficiente, y a base de agotar posesiones con bote estéril y de lanzar a canasta sin haber generado ninguna ventaja, dejaron escapar cualquier opción. No ayudó tampoco la escasa aportación que el de Akron encontró a su alrededor, especialmente en un quinteto titular en el que nadie al margen de él superó los 8 puntos.
Sí le llegó más ayuda desde la segunda unidad, en la que Russell Westbrook, con 19 tantos y 5 asistencias, fue su mejor escudero, mientras que las aportaciones puntuales de Kendrick Nunn y Max Christie, autores de 14 y 12 puntos, fueron también importantes. Con todo, parece casi un problema que sean estos los hombres que hayan tenido que asumir galones, sobre todo tras unas semanas en la que parecía que otros jugadores como Schröder o Bryant, desaparecidos anoche, habían dado por fin un necesario paso adelante.
(Fotografía de portada: Ronald Martinez/Getty Images)