Por algo Chris Paul es uno de los mejores bases de la historia de la competición. El pasado verano, cuando salió traspasado de Houston, su figura era contemplada, sobre todo, por el elevado peaje que arrastraba con su salario. Unos meses después y siendo el líder de unos Thunder que han sorprendido a todos los niveles, Paul vuelve a ser considerado un activo de alta gama.
Prueba de ello es que el veterano base vuelve a estar presente en los rumores de traspasos. Parece que los New York Knicks serían uno de los equipos interesados en Paul después de los últimos acontecimientos, según pudo informar el periodista Frank Isola (ESPN).
El supuesto interés de los Knicks tendría la intención de tratar de conseguir el traspaso de Paul a partir del próximo verano. El jugador (34 años) ha probado ser una influencia ganadora en los Thunder esta temporada, todo un líder, y por ello los Knicks pensarían en él como viento de popa para impulsar su siempre oxidado proyecto.
La tara que tiene apostar por Chris Paul a estas alturas es su contrato. Está ofreciendo un formidable rendimiento, llegando a ser nuevamente All-Star (décima vez en su carrera). Sin embargo eso no quita para que su sueldo resulte de lo más elevado allá a donde vaya. A Paul le quedan todavía dos temporadas, la última sujeta a opción de jugador, a cambio de 41,3 y 44,2 millones de dólares en cada una de ellas.
De sobra conocen esas cifras en los Knicks y no podrían no ser impedimento para hacer una intentona por Paul el próximo verano. En New York cuentan con la ventaja de no tener que extender el contrato de ningún joven importante hasta dentro de dos años. Por ello, cuentan con millones de sobra para dar y regalar. Qué mejor influencia en su plantilla que invertir ese hueco en Chris Paul, que en el pasado fue representado por Leon Rose, nuevo presidente de la franquicia. Eso piensan ahora mismo en la Gran Manzana. Y puede no ser un mal enfoque visto lo visto.
(Fotografía de portada: Gregory Shamus/Getty Images)