Los Lakers dan la campanada en San Antonio

En estos instantes de la temporada, es siempre bueno recordar que el famoso tanking, esa estrategia que teóricamente lleva a perder partidos para mejorar opciones en el Draft, es cosa de ejecutivos. En la cancha, los resultados pueden ser muy diferentes. Los Lakers, a costa de comprometer sus opciones para la lotería del 16 de mayo, lograron una de sus victorias más meritorias de la temporada en San Antonio por 95-102.

Un inicio dorado


Cabe recordar también que los Spurs no tienen nada en juego, con el segundo balance del Oeste y de la Liga ya asegurado, y sin nada más en juego que el honor y la salud. Aun así, ante los Lakers salieron casi con su equipo de gala, con Manu Ginóbili, tocado por una contusión muscular, como ausencia más notable. Pero si el equipo de Gregg Popovich quiso forzar a sus estrellas, el arranque de partido le hizo cambiar radicalmente de opinión.

A principios del segundo cuarto, los Lakers dominaban 14-38 en un AT&T Center más que sorprendido por lo que se veía en la cancha. Brandon Ingram, pese a jugar menos de 10 minutos por sus problemas físicos, tuvo momentos de auténtico dominio en los minutos iniciales. El improvisado juego exterior formado por Tyler Ennis (19 puntos y 6 asistencias en ausencia del tocado D’Angelo Russell) y Jordan Clarkson (17 puntos) mantuvo el nivel para el equipo angelino.

Cosa de secundarios


Tras el susto inicial, eso sí, los Spurs reaccionaron. Popovich quiso buscar la remontada con sus mejores jugadores, dejando que Kawhi Leonard y LaMarcus Aldridge tomaran el control. Un parcial de 9-0 ponía un resultado más digno para San Antonio, aunque los Lakers seguirían dominando. Tras el descanso Popovich decidió dar minutos extra de descanso a sus estrellas, siendo meritorios como Davis Bertans (14 puntos) o Kyle Anderson (11) los que tirarían del equipo.

Funcionó de primeras, llegando a empatar a 76 puntos a principios del último cuarto. Los Lakers habían perdido a Jordan Clarkson, natural de San Antonio, por un golpe en la rodilla izquierda. Pero fueron dos recién llegados los que asegurarían el triunfo: el propio Tyler Ennis y el sorprendente David Nwaba (10 puntos, 6 en el último cuarto). Fue la rúbrica de unos Lakers que, al menos por parte de sus jugadores, aún creen en el valor de las victorias logradas en la cancha.

La tensión por la elección del Draft

Con un balance de 23 victorias y 55 derrotas los Lakers parecen destinados a quedarse con la tercera peor marca del año, superando a Phoenix Suns (22-57). Sus posibilidades de mantener la elección del Draft 2017 —algo que solo sucederá si cae entre las tres primeras— se han reducido en los últimos días del 55,83% al 46,93% y parece que no se moverán de ahí, por lo que ahora mismo hay más probabilidades de que los angelinos pierdan su elección a que la mantengan. Las probabilidades de su elección se reparten ahora mismo de la siguiente manera:

  • 1ª elección: 15,60%
  • 2ª elección: 15,74%
  • 3ª elección: 15,59%
  • 4ª elección: 22,57%
  • 5ª elección: 26,48%

Nota: Alberto de Roa y Elio Martínez colaboraron en la redacción de esta noticia.


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