Los Magic se hicieron con una sorprendente victoria en su visita al State Farm Arena, o lo que habría sido al menos una sorprendente victoria de darse en condiciones normales. En un encuentro marcado por las numerosas ausencias debidas a los protocolos de seguridad, los de Orlando se impusieron a los Hawks por 98-104, sumando su séptimo triunfo de la temporada y logrando así enlazar dos victorias consecutivas por primera vez en lo que va de curso. Los locales, por su parte, vieron agravado su mal momento, y con esta derrota vuelven a caer fuera de los puestos que dan acceso al play-in.
Sin Trae Young, Clint Capela, Kevin Huerter y Danilo Gallinari entre otros, los de McMillan estuvieron sostenidos casi en exclusiva por las excelentes actuaciones de Cam Reddish y John Collins, cuyos 34 y 28 puntos respectivamente les hicieron brillar pero no fueron suficientes para superar a los de Florida. El alero logró encestar 6 triples en sus 10 intentos mientras que el ala-pívot firmó un doble-doble al capturar 12 rebotes, pero ningún otro miembro del equipo alcanzó los dobles dígitos, haciendo imposible contar con el volumen de anotación necesario para ganar.
Uno de los hombres llamados a aportar una solución en ese sentido era Lance Stephenson, que hizo su regreso a las pistas de la NBA tras más de dos años lejos de la liga. El escolta, que firmó recientemente un contrato de 10 días con Atlanta, contó con hasta 22 minutos para tratar de ayudar a los de Georgia a revertir la situación, pero se le notó algo oxidado y fue incapaz de anotar un solo lanzamiento de campo, aunque logró ser eficaz gracias a sus 8 rebotes y 5 asistencias. Tampoco pudo aportar demasiados puntos Bogdan Bogdanovic, quien regresó tras perderse los últimos ocho partidos por culpa de una lesión en el tobillo y lo hizo quedándose en 6 tantos.
Los Magic afrontaron el duelo también con numerosas ausencias, algunas debidas a los protocolos, como las de Terrence Ross o Mo Bamba entre otros, y otras a problemas físicos como las de Cole Anthony o Wendell Carter Jr. Los de Florida, no obstante, consiguieron sobreponerse mejor a la situación gracias al paso adelante de varios de sus hombres, entre los que destacó más que nadie Franz Wagner.
El rookie, que ya ha hecho gala de sus habilidades para anotar en más de una ocasión, comandó a los suyos con 25 puntos, cifra que alcanzó por cuarta vez en su corta carrera. El alero, no obstante, quiso incidir en la gran aportación de los jugadores recién incorporados para tapar las ausencias debidas al Covid-19, cuya contribución valoró especialmente.
«Es impresionante que puedan llegar con tanta confianza y energía» dijo en referencia a hombres como Hassani Gravett, Admirald Schofield o Tim Frazier. «Creo que debe ser muy difícil para ellos, ya que llegan sin conocer los sistemas y sin tener tiempo para adaptarse, así que es realmente sorprendente. Por si fuera poco, todos son chicos fantásticos y ya han creado una gran química».
Entre los nuevos, quien más aportó fue B.J. Johnson, autor de 14 tantos desde el banquillo gracias a su 6/7 en el tiro. El ala-pívot terminó de hecho como el tercer máximo anotador del equipo, solo por detrás del mencionado Wagner y de Gary Harris, quien sumó 17 puntos. Por su parte, Robin Lopez alcanzó los 10 tantos, y logró además repartir 11 asistencias para establecer un nuevo récord en su carrera.
(Fotografía de portada: Kevin C. Cox/Getty Images)