13 puntos abajo al inicio de la segunda parte. Delante, uno de los mejores equipos del Oeste. La temporada en juego. Los Mavericks se vieron contra la espada y la pared en la visita de los Kings al American Airlines Center, pero, cuando la situación exigía lo mejor de ellos, los de Kidd respondieron.
Dallas se llevó por 123-119 un partido que, si bien no era matemáticamente a vida o muerte, prácticamente podía considerarse como tal. El conjunto texano se aferró con todo a sus opciones de play-in y sacó adelante un triunfo que les permite empatar con los Thunder por la décima posición del Oeste, puesto que sigue en manos de OKC dado que cuentan con ventaja en el desempate particular. Sin embargo, a dos encuentros para el final de la liga regular, los Mavs siguen ahí. Lo cual, al descanso de este choque, llegó a estar en duda.
Con Fox haciendo mucho daño con sus 17 tantos en la primera parte y todo el juego girando alrededor de Domantas Sabonis, Sacramento parecía dominar con bastante comodidad el duelo cuando ambos equipos pusieron rumbo a vestuarios. Si bien la diferencia nunca llegó a ser enorme (qué son 13 puntos en la NBA actual), las sensaciones no eran precisamente positivas para los locales, en los que solo Luka Doncic con otros 17 tantos estaba evitando un desastre mayor. Los texanos necesitaban algo parecido a un milagro para renacer. Y lo encontraron.
Lo primero que hicieron fue recuperar su acierto exterior, que brilló por su ausencia en la primera parte (7/22) pero que empezó a aparecer en el tercer periodo. Con 6 triples en 10 intentos, los Mavericks empezaron a recuperar sensaciones y lograron dar la vuelta al marcador en cuestión de minutos, pillando por sorpresa a unos Kings que sin embargo supieron reaccionar y recuperar el control. El choque quedó abocado a un último cuarto muy parejo, momento en que Kyrie Irving se alzó como el gran protagonista de la noche.
Irving al rescate
El ex de los Nets no estaba firmando ni mucho menos un gran partido. Su primera mitad fue de hecho bastante pobre, y aunque en el tercer cuarto logró sumar dos triples importantes, estaba aún lejos de su mejor versión. Pero eso cambió cuando llegó el último parcial, en el que se vistió de salvador de Dallas con una actuación sensacional en el momento más importante del año.
Con 19 puntos en el último cuarto, Kyrie logró irse hasta los 31 para terminar como máximo anotador del duelo y doblegar a Sacramento en los minutos finales. El base comenzó anotando algunos tiros inverosímiles marca de la casa y terminó su exhibición con dos triples en los últimos minutos que dejaron el duelo inclinado a favor de los suyos. En cuestión de dos cuartos, pasó de señalado por su primera mitad a acaparar los focos por su cierre de partido, sacándose de la chistera un triunfo del que acordarse si estos Mavericks acaban participando en la postemporada.
«No siempre se puede hacer esto en el último cuarto» comentó. «Echando la vista atrás a los últimos partidos, ojalá hubiese podido jugar tan bien como hoy. Hoy hemos jugado a la desesperada. Esta no es la primera vez que me veo en una situación en la que es obligatorio ganar, así que me he sentido bien».
Doncic, con 29 puntos, terminó segundo en anotación, y aunque cedió el protagonismo en favor de Irving en el último cuarto, tuvo gran parte de la culpa de que el duelo no llegara ya muy cuesta arriba a dicho tramo. Tim Hardaway Jr., por su parte, eligió una buena noche para ofrecer una de sus mejores versiones, pues con 5 triples en 8 intentos logró sumar unos 24 tantos que también fueron fundamentales.
Los Kings, por su parte, perdieron de esta manera una gran oportunidad de recortar distancias a los Grizzlies y mantener sus opciones de ser segundos del Oeste. Si bien matemáticamente siguen teniendo opciones de alcanzarlos, estas son bastante escasas, pues son dos los partidos que les separan en la clasificación con solo dos encuentros por disputarse. De’Aaron Fox con 28 puntos y Domantas Sabonis con un nuevo triple-doble de 19 tantos, 11 asistencias y 11 rebotes trataron de liderar a los suyos a la victoria, pero no pudieron evitar un tropiezo que prácticamente certifica su tercera posición.
(Fotografía de portada: Ron Jenkins/Getty Images)