Los Mavs también saben ganar sin Doncic. El esloveno se perdió esta madrugada su segundo encuentro de la temporada debido a unas molestias en la espalda, lo cual no impidió a los texanos imponerse a Oklahoma City en un duelo en el que, eso sí, su ataque lució mucho menos de lo habitual. Los de Carlisle vencieron por 87-78, un marcador que parece propio de otra década y que supone la peor anotación de ambos equipos en lo que va de temporada.
De hecho, ningún jugador logró alcanzar la veintena de puntos en el partido, pues los máximos anotadores fueron Kristaps Porzingis y Tim Hardaway Jr., ambos con 19. El letón logró además capturar 13 rebotes para firmar un doble-doble y consagrarse como el mejor de los suyos. Josh Richardson con 16 tantos y Jalen Brunson con 11 terminaron también en dobles dígitos.
Los texanos vivieron tramos de enorme atasco, y sus problemas para generar sin Doncic quedaron en evidencia ante unos Thunder que, por suerte para los de Carlisle, también pecaron del mismo problema. Por ejemplo, Dallas falló 22 de los primeros 23 triples que intentó, y aun cuando con el paso de los minutos el acierto exterior fue creciendo terminaron con un pobre 8/40. Además, los Mavs no fueron capaces de anotar más de 12 puntos en el último cuarto, lo que, pese a ir ganando por 22 tantos de ventaja, podría haberles costado un susto ante un equipo más entonado.
En OKC, Shai Gilgeous-Alexander terminó como líder en anotación, aunque lo hizo con unos discretos 15 puntos a los que añadió 3 asistencias. Por su parte, Ty Jeremoe terminó con 13 tantos en su haber, mientras que Theo Maldeon y Darius Bazley firmaron 11 cada uno, a los que este último añadió 10 rebotes.
Los de Daigneault terminaron el encuentro con un 33,3% de acierto en el tiro, lo cual supone su peor actuación de la temporada también en ese sentido.
(Fotografía de portada: Ronald Martínez/Getty Images)