Los Brooklyn Nets están en un gran momento de forma. Pese a que siguen sin poder contar con Kevin Durant, los neoyorquinos han logrado enlazar seis victorias consecutivas después de haber derrotado a los Clippers por 108-112, logrando así imponerse a los dos equipos de Los Ángeles en un fin de semana y reforzando enormemente su condición de candidatos a todo. Es más, los de Nash han cerrado su gira por el Oeste de forma inmaculada, y se encuentran ya a solo medio partido en la clasificación de los Philadelphia 76ers, actuales líderes de la Conferencia Este.
Este triunfo, sin embargo, no llegó sin sufrimiento. Pese a que los Nets llegaron a contar con 15 puntos de ventaja en el último cuarto, los Clippers supieron rehacerse y empataron el partido a 108 con solo medio minuto por jugarse, lo que daba a los visitantes una única posesión para romper la igualada. Kyrie Irving asumió la responsabilidad y buscó un triple que fue escupido por el aro, pero DeAndre Jordan, con un complicadísimo palmeo, logró devolver la ventaja a los suyos con apenas 11 segundos restantes en el electrónico.
Era el turno de los locales, que fiaron su última posesión a Kawhi Leonard. El alero, defendido por James Harden, logró penetrar hacia canasta sin demasiados problemas y absolutamente nadie acudió para ayudar en labores de intimidación, pero, justo mientras el angelino introducía el balón en el aro, los árbitros señalaron falta en ataque, anulando la acción. En la repetición se aprecia cómo Leonard usa ligeramente su brazo izquierdo para alejar a Harden del esférico, pero también se ve cómo el escolta vende excesivamente el contacto en busca precisamente de que se señalice la falta. Juzguen ustedes.
Fue precisamente Harden quien, al margen de esta polémica acción, más brilló en el choque. La Barba terminó con 37 puntos, 11 rebotes y 7 asistencias, firmando unos buenos porcentajes de tiro (52%) y ejerciendo de líder de los Nets en ausencia de Durant. Irving, por su parte, estuvo algo menos fino, especialmente en el tiro de tres (2/11), pero fue también fundamental gracias a sus 28 tantos y 8 asistencias. En cuanto a los hombres de rotación, hasta tres de ellos terminaron con 13 puntos en su casillero, a saber, Joe Harris, DeAndre Jordan y Bruce Brown, lo que dio a Brooklyn el impulso suficiente para llevarse el triunfo pese a jugar con solo ocho jugadores.
George vio el final desde el banquillo
En los locales, Paul George terminó como máximo anotador gracias a sus 34 tantos, cifra que podría haber sido algo mayor de no haber contado con una restricción de tiempo. El alero, en su segundo partido tras recuperarse de su lesión en un dedo del pie, no podía disputar más de 33 minutos, cifra a la que llegó cuando quedaban 2 minutos y 50 segundos para el final del partido y el triunfo estaba en el aire. Pese a que llevaba 12 puntos en el último cuarto y había sido el gran artífice de la remontada local, Lue no tuvo más remedio que sustituirle, lo que no pareció sentarle bien. «Quería seguir jugando. Estoy recuperado y me encuentro perfectamente» aseguró el jugador.
Kawhi Leonard, por su parte, terminó con 29 tantos y 13 rebotes en su haber, cuajando también una gran actuación que, sin embargo, no encontró apoyo en el resto de integrantes de la plantilla. Solo Ivica Zubac, con 13 puntos, alcanzó los dobles dígitos entre los hombres de rotación, pues jugadores como Lou Williams o Serge Ibaka estuvieron bastante grises y no aportaron lo suficiente para ayudar a los suyos a sumar una nueva victoria.
(Fotografía de portada: Elsa/Getty Images)