Noche redonda para los de San Francisco. Con un público entregado en el Chase Center, los chicos de Steve Kerr recibieron sus anillos de campeones del curso 2021-22 en una ceremonia previa a un partido ante Lakers en el que demostraron –por si había dudas–, que están preparados para defender el título logrado el pasado mes de junio.
Todo fue felicidad para los Warriors. Aunque tras el salto inicial la igualdad fue la predominó sobre el parqué durante dos cuartos, la segunda parte supuso la ruptura de un partido que se terminaron llevando con comodidad. Stephen Curry fue el máximo anotador de la noche con 33 puntos a los que añadió siete asistencias, seis rebotes y cuatro robos, y Golden State pasó de vencer por siete puntos al descanso a estar 27 arriba a falta de muy poco para concluir el tercer cuarto. Partido resuelto hasta escuchar la bocina final con un 123-109 en el electrónico.
Lo cierto es que el encuentro no deparó sorpresa alguna. Si por los Warriors Stephen Curry brilló y estuvo acompañado por el buen hacer de Andrew Wiggins (20 puntos) y Klay Thompson (18 puntos), en el caso de los Lakers fue LeBron James quien lideró en todo momento al equipo con 31 puntos, 14 rebotes y 8 asistencias, mientras que Anthony Davis logró 27 tantos y Russell Westbrook concluyó con un doble-doble de 19 puntos y 11 rebotes. Hasta aquí todo estaba en orden para los angelinos, pero es que en el baloncesto no solo cuentan los titulares…
Decimos eso porque en las segunda unidad arrasó Golden State. El parcial exacto fue de 39-24 para los locales, quienes demostraron contar con una profundidad envidiable en sus filas. Jordan Poole estuvo en 12 puntos y 7 asistencias, mientras que otros tres compañeros alcanzaron los ocho tantos. Justo en este grupo final se encuentra James Wiseman, quien volvió a disputar un partido oficial para dejar buenas sensaciones en los 17 minutos que estuvo en pista. Ocho puntos, siete rebotes y un tapón fueron sus números exactos.
Debut de Ham
Pese a la derrota, fue sin duda una noche importantísima para Darvin Ham, quien debutaba como entrenador de los Lakers. Sobre ello, el técnico comentó lo orgulloso que estaba de representar a la ciudad de Saginaw (Michigan), justo la misma en la que nació Draymond Green. Además, dejó claro que el comienzo de campaña de los angelinos tiene bastante de prueba empírica, ya que aún no saben qué funciona y qué no.
«La forma en que hemos cambiado algunas cosas tanto ofensiva como defensivamente dentro de nuestro sistema, es como si todo se encontrase ahora en una gran olla, así que lo mezclaremos con una cuchara y veremos qué sabe bien y qué no», expresa.
Duro calendario para Lakers
Empezar contra los actuales campeones no es nada sencillo, pero lo que viene a continuación tampoco es mucho mejor. En los siguientes siete encuentros los Lakers deberán jugar dos veces contra Denver y una ante Clippers, Blazers, Timberwolves y Pelicans, todos equipos que tienen como mínimo la aspiración de estar en playoffs. Será una buena piedra de toque para saber si el nuevo proyecto angelino está preparado para brillar en el curso 2022-23.
(Fotografía de Ezra Shaw/Getty Images)
