¿Se acabarán algún día los calificativos para definir a Luka Doncic? Apuesten por el sí. Noche tras noche su baloncesto brilla de un modo especial. Sus acciones son espectaculares, propias de un talento sin igual –lo que es–. Por eso ver lo que hizo anoche no sorprende por el hecho en sí, sino porque para él es un estado natural. Vive por encima de la mayoría de rivales, y contra Boston, jugando en Dallas, volvió a deleitarnos con una actuación que concluyó con una de esas canastas que directamente se cuelan en nuestra memoria histórica de la NBA: triple sobre la bocina con tres rivales encima para ganar el partido 107-104.
Los Mavericks son Doncic. Mucho se habla de rodearlo mejor, sobre todo de cara a playoffs, pero pocas veces se ha visto que un jugador abarque tanto sobre una cancha, recoja tanto peso sobre su espalda y, lo que es más importante, lo haga tan rematadamente bien. 31 puntos, 9 rebotes y 5 asistencias fueron sus números anoche, pero nada de eso importaba cuando a falta de 11 segundos estaban empatando con los Celtics. El mago esloveno cogió el balón, dribló, fue hacia la izquierda y metió un asombroso triple que hizo que la grada se cayese. Los aficionados de los Mavs se están acostumbrando a estas cosas.
«Yo jugué antes con un jugador como este aquí; todos sabían que la pelota iba al ’41’ y él cumplía. Ahora todos saben que el balón va al ’77’ y él se encarga», comenta Jason Kidd, head coach de Dallas.
Regreso de Porzingis
Las buenas noticias para los Mavs no se quedaron en Doncic. Tras cinco partidos ausente retornó a las canchas Kristaps Porzingis, quien acabaría la noche con 21 puntos (15 en la segunda parte) y 7 rebotes. El letón se mostró feliz por haber regresado junto a sus compañeros. «Estoy muy contento de estar de vuelta en la cancha. Apesta no poder jugar y ayudar, y además tienes que poner todo el trabajo cardiovascular para asegurarte de mantenerte en forma. Jugar es la parte divertida».
Tatum recupera el acierto
Llegando a Dallas tras después de vencer de paliza en Miami, los Celtics mostraron anoche rebeldía para agarrarse a un partido que por momentos parecía que se les escapaba; no en vano llegaron al descanso 17 puntos abajo. Pese a ello, y guiados por un Jayson Tatum muy mejorado con 32 puntos y 11 rebotes, fueron remando hasta llegar a ponerse por delante (102-104) con algo más de dos minutos por jugar. Hasta ahí llegaron. Porzingis y Doncic cerraron la noche a favor de Dallas.
«Sabía que estaba luchando en ese extremo para jugar bien y meter los tiros. He dedicado demasiado tiempo y trabajo para ahora dudar de mí mismo», comenta Tatum, quien llegaba tras firmar un 7 de 29 en el lanzamiento combinando los dos partidos anteriores.
Más allá del alero, en Boston también destacaron Dennis Schröder con 20 puntos y 6 asistencias, volviendo a ser titular; así como los 16 tantos de Robert Williams y los 14 de Al Horford.
(Fotografía de Tom Pennington/Getty Images)