Luka Doncic vuelve al triple-doble para vencer en Houston

Pasado de peso, fuera de forma, falto de acierto… Las primeras semanas de competición se estaban convirtiendo en una continua crítica para Luka Doncic. El base de Dallas, quien ha acostumbrado al aficionado a la excelencia casi desde su debut en la NBA, había mostrado cierta irregularidad en los primeros partidos del curso, pero anoche dejó claro que ello no era motivo para dudar de él. En su sexto encuentro de la temporada 2020-21, en Houston, ha logrado su primer triple-doble para vencer a los Rockets por 100-113 y disipar cualquier duda sobre su rendimiento.

Para ser exactos han sido 33 puntos, 16 rebotes y 11 asistencias con los que golpear a su rival del estado de Texas. El esloveno, enormemente acompañado por los 30 puntos de Tim Hardawy Jr. desde el banquillo, ayudó a que los Mavericks dominasen el marcador a lo largo de casi todo el partido hasta resolver en la recta final. Cuando restaban 6:41 minutos para el final lo chicos de Rick Carlisle ganaban por solo dos puntos (92-94). Cuatro minutos después, a poco más de dos minutos para la conclusión del encuentro, lo hacían por 14 puntos (92-106), merced a un parcial de 12-0 en el que Houston falló cinco tiros y perdió dos balones. Al entrenador le gustó especialmente que la victoria se cimentase en la defensa.

«Defensivamente es como vamos a poder marcar la diferencia esta temporada. Así es como va a ser. Tenemos que construir sobre este concepto de alguna manera», reseñaba Carlisle.

Si para los Mavs salió casi todo bien, en Houston estaban para menos fiestas. Volvió James Harden tras perderse el último partido por un esguince de tobillo, pero tuvo una discreta actuación de 21 puntos con un pobre 5 de 17 en tiros de campo; eso sí, aportó 10 asistencias. Junto a él, los otros jugadores del equipo que alcanzaron la veintena de puntos fueron Christian Wood con 23 y Eric Gordon con 20 (desde el banquillo). John Wall por su parte se quedaría en 14. Stephen Silas cree que les faltó fluidez. «Estábamos demasiado estancados, no movimos el balón lo suficiente como para presionarlos y ponérselo difícil», analiza.

Hardaway, estelar desde el banquillo

La gran novedad antes de comenzar el partido llegó de mano de Rick Carlisle. El head coach de Dallas decidió cambiar su quinteto inicial para dar entrada a Willie Cauley-Stein (pívot) por Tim Hardaway Jr.; es decir, optó por aumentar notablemente el tamaño de su alineación. La variante le salió realmente bien al técnico, ya que el center rindió bien con 15 puntos y 7 rebotes en 24 minutos, mientras que el shooting guard directamente dejó a todos boquiabiertos con una actuación de 30 puntos, incluyendo un increíble 8 de 10 desde la línea de tres puntos. «Fue una actuación en la que Tim demostró tener un carácter fuerte. Estuvo genial a ambos lados de la cancha. Tim mostró clase y profesionalismo para responder así a un cambio en el quinteto», comenta el entrenador.

Cousins, expulsado

El DeMarcus Cousins de toda la vida. Desde que llegó a la NBA conocemos tanto su talento como su temperamento, y anoche tuvimos bastante más de lo segundo. El pívot duró en pista solo tres minutos al ser expulsado por dos faltas técnicas. La primera llegó tras una disputa por el rebote con Willie Cauley-Stein en la que ambos se empujaron. La segunda poco después al pedir falta en una penetración que hubiese supuesto un and one a su favor. La primera pareció clara. La siguiente fue más rigurosa, ya que es algo habitual ver a los jugadores pedir faltas. A Silas no le gustó nada la decisión del colegiado.

(Fotografía de Ronald Martinez/Getty Images)


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