Kyrie Irving tuvo que abandonar el partido de anoche entre Boston y Los Angeles Clippers por un esguince en la rodilla derecha. A partir de entonces, la situación se complicó para los verdes tanto dentro como fuera de la cancha.
Los Celtics tenían el control del partido cuando Irving se lesionó la rodilla al intentar defender a Garrett Temple a falta de unos cinco minutos para el descanso. Desde ese momento, los Clippers superaron a los Celtics por un parcial de 75-44. Remontaron 28 puntos para terminar llevándose la victoria por 123-112.
Fue la mayor remontada en la NBA en las últimas dos temporadas y la mayor en la historia de los Clippers. Fue la ventaja perdida más grande de los Celtics desde el 5 de diciembre de 2003. Y se produjo dos noches después de que Boston cediera una ventaja de 18 puntos a los Lakers de Los Ángeles en el TD Garden.
El entrenador de los Celtics, Brad Stevens, dijo que la rodilla de Irving parecía doblarse en el segundo cuarto y que el base de 26 años se someterá a más pruebas el domingo. Pero Stevens dijo que la lesión no fue la culpable del colapso de su equipo. «No hay excusas», dijo Stevens a NBC Sports Boston. «Esas cosas suceden y todos tenemos que aprender de esto. Tratar de ver las cosas que se pueden hacer mejor».
El enfado de Morris
Marcus Morris, sin embargo, no fue tan suave en sus comentarios después del partido. El jugador de los Celtics atribuyó la derrota de su equipo a la falta de cohesión entre los compañeros. Calificó el esfuerzo de los suyos de «inaceptable» y dijo que hace tiempo que no se divierten en la cancha.
«Quiero decir, para mí, no se trata realmente de haber perdido el partido», dijo Morris. «Se trata de la actitud con la que jugamos. Los chicos están inclinando la cabeza. Simplemente no es divertido, no es divertido. No estamos compitiendo a un alto nivel. Incluso cuando estamos ganando, no es divertido. No veo la alegría en el juego. «Observo a todos estos otros equipos en la liga y veo a los compañeros animando desde el banquillo. Se alegran del éxito de sus compañeros. Están disfrutando de todo y jugando juntos. Y cuando nos miro a nosotros, veo a un grupo de individuos», concluyó.
«Para que seamos un equipo de campeonato, hombre, esto tiene que cambiar», dijo. «Tenemos que querer realmente ganar. Ese debe ser el primer objetivo. Hacer lo que sea necesario para conseguirlo. La fecha límite para hacer traspasos ya se terminó. Este es el equipo con el que estamos trabajando. Esto es lo que vamos a hacer. Así que es inaceptable lo que ha pasado esta noche».
Los Celtics han perdido dos partidos consecutivos contra los dos equipos de Los Ángeles y jugando como locales esta semana. Venían de ganar 10 partidos de los últimos 11 y ahora parece que han entrado en una pequeña crisis. Veremos cómo de grave es la lesión de Kyrie Irving y cómo evoluciona el equipo en las próximas semanas.
(Foto de portada de Maddie Meyer/Getty Images)