Cuando parecía en posición de firmar el contrato de su vida, Malik Beasley se vio salpicado por una investigación por conducta sospechosa en lo referente a las apuestas deportivas. Concretamente, referidos a un tramo de inicios de 2024 en el que las apuestas con él como objeto fueron usualmente altas. Desde entonces, allá por junio, no hay demasiadas novedades de la investigación. Más allá del increíble reportaje de Pablo Torre y compañía desentrañando el asunto.
El propio Beasley también ha mantenido el silencio a pesar de que la investigación le haya costado unos 48 millones de dólares. Hasta ahora, que ha alzado la voz desde su perfil de Snapchat: «La gente está diciendo muchas locuras, me están juzgando. Te diré una cosa: tengo un peso sobre los hombros y estoy preparado para destruir a cualquiera en frente de mí. Estoy listo para demostrar de nuevo que pertenezco a esta liga».
A estas alturas, no existen rumores de ningún equipo interesado en su situación. Aunque su regreso seguramente se tuviese que dar por un contrato mínimo dado el contexto del jugador y la estrechez salarial que afecta a la liga. No es la primera vez que Beasley choca con la justicia, ya que en 2021 fue condenado a 120 días de cárcel tras apuntar a una familia con un arma de fuego. Minnesota Timberwolves, entonces su equipo, le sancionó con 12 partidos extra.
¿Saldrá de nuevo del entuerto? Él tiene claro que sí.
(Fotografía de portada de Rick Osentoski-Imagn Images)